Las previsiones de producción de energías fósiles en 2030 son incompatibles con las metas del Acuerdo de París sobre el clima: un exceso de 50% para no superar 2 ºC de calentamiento y de 120% para limitarlo a 1,5 ºC, según un informe publicado el miércoles.
Estas estimaciones son fruto de un trabajo inédito de varios organismos de investigación, con el apoyo del Programa de la ONU para el Medio Ambiente (UNEP).
“Este informe demuestra por primera vez la envergadura del desfase entre los objetivos del Acuerdo de París, los planes nacionales (de reducción de emisiones) y las políticas de producción de carbón, petróleo y gas”, según Michael Lazarus, uno de los principales autores.
Las energías fósiles siguen representando 80% de la energía primaria mundial, toda vez que los actores del sector continúan invirtiendo masivamente. Estas contribuyen en un 75% en las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, que no retroceden.
“Pese a más de dos décadas de política climática, los niveles de producción de energías fósiles nunca fueron tan elevados como ahora”, según Mans Nilsson, director del Instituto de Medio Ambiente de Estocolmo, también coautor.
El informe emplea el término en inglés “production gap”, es decir, el desfase existente entre las previsiones de producción y los niveles compatibles con un calentamiento limitado a 1,5 ºC o 2 ºC respecto a la era preindustrial, que son las metas que se acordaron en el Acuerdo de París de 2015.
Esta cifra es más elevada respecto al carbón: la producción prevista en 2030 excede en 150% el nivel compatible con el objetivo de 2 ºC y en 280 ºC el de 1,5 ºC.
Las previsiones de producción de petróleo y de gas en 2040 superan respectivamente 40 y 50% los niveles compatibles con 2 ºC.
Acumulados, los compromisos de reducción de emisiones adoptados por los países en 2015 llevarían a un alza de más de 3 ºC, por lo que el Acuerdo prevé que se aumenten las metas para finales de 2020.
Pero, según el informe, las previsiones de producción de carbón, de gas y de petróleo para 2030 son igualmente excesivas para cumplir las metas nacionales de 2015: +17% para el carbón, +10% de petróleo y +5% de gas.
Los científicos se apoyaron en proyecciones nacionales de 10 países clave: los siete principales productores de energías fósiles (China, Estados Unidos, Rusia, India, Australia, Indonesia y Canadá) así como Alemania, Noruega y Gran Bretaña.