El grupo de inversión Goldman Sachs anunció importantes cambios en sus políticas ambientales, afirmando que dejarán de financiar proyectos que “conviertan o degraden significativamente hábitats naturales”.
Asimismo, la firma rechazó invertir en cualquier exploración petrolera en el Ártico, incluido el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico.
A través de su marco de Política Ambiental, la compañía aseveró que “la explotación de petróleo en el Círculo Polar Ártico puede provocar condiciones de operación severas, daño al hielo marino, a la cobertura de permafrost y tener impactos potenciales en hábitats naturales críticos para especies en peligro de extinción”.
En su sitio oficial destacan que los ecosistemas únicos del Ártico además apoyan los medios de subsistencia de poblaciones indígenas que han permanecido en determinadas zonas de la región durante siglos.
Por su parte, desde Goldman Sachs precisaron que tampoco financiarán nuevas centrales eléctricas de carbón en países en vía de desarrollo, medida que hasta ahora sólo se aplicaba en Estados Unidos y otros países desarrollados.
Cabe destacar que Davido Solomon, responsable ejecutivo de Goldman Sachs, ahondó en los planes de la empresa para lograr un sistema de financiamiento más sostenible.
A través de un artículo de opinión publicado en el Financial Times, Solomon detalló que en los próximos diez años, la firma destinará 750.000 millones de dólares en proyectos de financiación, inversión y asesoramiento “a nueve áreas que se centran en la transición climática y el crecimiento inclusivo”, escribió.
En ese sentido, el ejecutivo precisó que estas actividades incluyen el uso de energía limpia, además de transporte, alimentación y agricultura sostenibles.