Si bien existen ciertos cánones bajo los cuales se rige el concepto de ser “sensual”, hay personas que a pesar de escapar de estos atributos tradicionales, de igual manera pueden ser considerados como “sexys”.

Así lo afirma la psicóloga clínica y consejera matrimonial Randi Gunther, quien en un artículo publicado en el sitio especializado Psychology Today sostiene que estas personas verdaderamente sexys no son necesariamente atractivas físicamente, ni jóvenes, ni siquiera seductoras.

“Sin embargo, son capaces de atraer constantemente parejas deseables a lo largo de su vida”, menciona, indicando que tras cuatro décadas como profesional, ha detectado las características que estas personas sexys tienen en común.

1. Saben cómo jugar a ser deseables (y a desear)

Gunther sostiene que estas personas tienen un sentido innato del ritmo interpersonal, es decir, si bien pueden jugar a ser deseables y a desear, también tienen la capacidad de desconectarse al sentir que la atracción mutua disminuye.

“Están a la vez completamente presentes y disponibles y, al mismo tiempo, pueden alejarse fácilmente, lo que los hace atractivos y desapegados al mismo tiempo. Invitantes pero no necesitados, tocando a su propio ritmo pero abiertos a un baile mutuo si sucede, están disponibles y son misteriosos a la vez”, detalla.

2. No se apegan al resultado

La experta menciona que otra característica de las personas sexys es que invierten tiempo y energía en la búsqueda de conexiones mágicas y emocionantes, aunque están abiertas a que las cosas evolucionen a su manera atemporal, “y solo cuando ambas personas están igualmente abiertas a ello. No se esfuerzan por establecer conexiones que sus parejas potenciales no busquen mutuamente”.

De esta manera, el resultado no se traza de antemano, sino que es la consecuencia del proceso en sí mismo. “La pareja deseada de una persona sexy nunca se siente coaccionada o manipulada en una situación que no buscó o no se dio cuenta de que era un proceso manipulado”, puntualiza.

3. Difíciles de atraer

Las personas sexys no son personas fáciles de atraer. Randi aclara que esto no se debe a que busquen manipular la situación, sino que más bien saben “que un compañero se acerca voluntariamente a ellas cuando está listo, nunca se arriesgan a violar los límites o aprovecharse de la necesidad”.

“Como no tienen prisa ni tienen un plan en mente, les dan a sus parejas el tiempo que necesitan para observar y confiar durante el tiempo que lo necesiten. Desde la distancia creada, todavía están muy interesados y vivos, pero nunca necesitan tener el control de cuándo o si se producirá una conexión”, detalla.

4. Son personas “juguetonas”

Randi asevera que quienes son sexys son juguetones. Son personas que se divierten con las probabilidades de conexión, pero disfrutan del proceso en vez de completarlo.

En ese sentido, la psicóloga clínica menciona que su amor por el capricho, la fantasía y la magia “los hace estar dispuestos a sumergirse en una oferta de ‘pase lo que pase, me estoy divirtiendo’ que le permite al otro tomar su propia decisión de unirse al juego o no.

5. Se preocupan de la salud

Otro atributo de las personas sexys, señala Randi, es que se preocupan de su cuerpo y salud.

“Viven en sus cuerpos, los consideran sagrados y los tratan con cuidado”, puntualiza, añadiendo que generalmente buscan aquello que les da energía y agota, preocupándose de mantener este equilibrio.

“Les encanta moverse, experimentar, buscar y explorar. El mundo es un lugar atractivo para ellos y esa actitud se extiende a las personas que conocen”, enfatiza.

6. No son pasivas

La especialista advierte que las personas sexys no son pasivas, ni siquiera cuando hacen el papel de esperar. En ese sentido, destaca que saben que las personas están más vivas “cuando son las iniciadoras de la conexión”.

En el ámbito sexual, sostiene que la excitación es más frecuente en el cazador que en el cazado, salvo en aquellas situaciones en que el cazado está igualmente emocionado por el juego interactivo de persecución y captura.

Saben que tienen la oportunidad de ser atrapados o de escapar. También pueden invertir los roles en cualquier momento, haciendo que el proceso sea más atractivo para ambos.

Las grandes conexiones sexuales siempre tienen este patrón. Es la naturaleza humana experimentar con la interacción y el intercambio de controlar o ser controlado, y una parte inherente de la conexión sexual de calidad.

7. Están bien tanto si están conectadas como si están solas

Estas personas disfrutan de la conexión mutua. Eso sí, Randi aclara que no la necesitan para sentirse satisfechas. En ese sentido, no necesitan “ganar” o “poseer” a otro, porque ya están completos, sin importar si están en pareja o no.

“Debido a su estado mental, es fácil conectarse con ellos, pero no necesitan nada a cambio. Al mismo tiempo, no están disponibles para cualquiera y dejan claro su propio precio por adelantado”, menciona Ghandi.

8. Saben lo que quieren y entienden a su pareja

Las personas sexys saben lo que quieren, y aunque no se sientan obligadas a entregar todo lo que se les pida, observan a sus parejas tanto a nivel emocional como también mental y sexual, teniendo claro qué es lo que quieren y qué esperar.

“Debido a que son capaces de “vivir” con precisión en la realidad de sus parejas, saben qué hacer para que se sientan cómodas, queridas y respetadas. Saben qué expresiones emocionales y físicas usar que tienen el efecto deseado de hacer que sus parejas se sientan vistas”, comentó.

9. No son chantajeables

Otro atributo de estas personas es que no pueden ser controladas o manipuladas. Es más, son capaces de elegir cuándo, dónde y con quién quieren conectarse, cualidades que las hacen ser seguras.

“Como resultado, las parejas que quieren estar con ellas entienden que necesitarlas, perseguirlas, seducirlas, tentarlas, ponerlas a prueba o hacer demandas simplemente no funcionará. Las personas sexys se poseen a sí mismas, pero están listas para conectarse apasionadamente si el deseo es mutuo”, detalla Ghandi.

10. No se obligan a sentir lo que no sienten

Las personas sexys saben que sus sentimientos más permanentes crecen a su propio ritmo, y no se obligan a sentir emociones que simplemente no les nacen.

“No pretenden estar más disponibles de lo que están, pero están completamente presentes en sus interacciones actuales, sin temer que su comportamiento implique algo que no promete”, advierte Randi.

En tanto, son personas que adoptan la filosofía de que vivir el momento es un requisito que, precisamente, los hace ver sexys.

Tres características para ser atractivo

Cabe señalar que en 2016, y en el mismo portal citado, el doctor Jeremy Nicholson, un destacado psicólogo social y de personalidad estadounidense experto en relaciones interpersonales, detalló cuales eran las características que hacen atractiva a una persona.

“¿Qué hace que alguien sea atractivo? ¿Es el aspecto físico, el comportamiento, la inteligencia o algo más único y especial? Con un poco de esfuerzo, probablemente podríamos pensar en alguien que es atractivo por cada una de estas razones. También podríamos hallar ejemplos de personas que son sexy por otra cualidad. Como resultado de ello, incluso si solemos preferir a un cierto ‘tipo’ de persona, raramente tenemos una idea concreta de qué es ser atractivo y por qué“, señaló.

“He pensado mucho en estas preguntas en los últimos años y he escrito varios artículos sobre el tema. Mirando hacia atrás, veo que en realidad existen una pocas maneras de ser atractivo o deseable para la pareja. Sin embargo, la forma (o formas) en que cada uno de nosotros decide ser atractivo depende de nuestras propias características y qué tipo de relación estamos buscando”, añadió.

En ese sentido, aseguró que existen 3 aspectos que pueden hacer a alguien atractivo para otra persona: físico, psicológico/personalidad y por comportamiento.

Atracción física

Esta se basa meramente en el aspecto físico. El doctor Jeremy relata que “todos sabemos que la apariencia física es importante para generar atracción. Pero de lo que mucha gente no se da cuenta es que eso puede ser más importante o menos, dependiendo del tipo de relación que quieren”.

En ese sentido, detalla que “usualmente, las relaciones que se centran exclusivamente en lo sexual y son de corta duración requieren un mayor atractivo físico, pero el aspecto físico se va volviendo menos importante a medida que una relación va creciendo en intimidad, unidad y apoyo a largo plazo“.

Atracción psicológica o por personalidad

El atractivo físico no es lo único que importa en la atracción. En el lado contrario a eso, tenemos los rasgos y características psicológicas de cada uno, es decir, la personalidad. “Estas características motivan más a la hora de establecer una relación a largo plazo y conexiones emocionales más íntimas“, sostiene.

No obstante, hay un problema: basarse sólo en la personalidad de alguien, sin considerar otros aspectos, “puede resultar en que se generen fuertes lazos de amistad sin que haya ningún interés sexual” (o sea, algo como la tan odiada friendzone).

Atracción por el comportamiento

Esta se ubica entre el aspecto físico y psicológico, y consiste básicamente en que tener un comportamiento osado, en el sentido de “jugársela” por conquistar a la otra persona.

“A este tipo de atractivo se refiere la gente cuando dicen que sentirse seguro de sí mismo es atractivo. A veces la gente es atractiva o deseable simplemente por la forma en que actúan o se comportan. Puede que sea porque usen el lenguaje corporal adecuado, para mantenerse apartados pero interesados a la vez. También puede que sea porque tengan una mirada seductora y emocionante. Saben cómo sonreír, coquetear y destacarse por su comportamiento”, señala.