Hace unos meses los estudios científicos concluyeron la razón de por qué con ciertas vacunas contra el coronavirus existía mayor riesgo de padecer trombosis. Dentro de los nombres que sonaban relacionadas a esta afección, se encuentra la AstraZeneca y Johnson & Johnson.

De acuerdo a las investigaciones anteriores, las vacunas contra el covid-19 que emplean vectores de adenovirus (virus fríos utilizados para suministrar material vacunal) envían parte de su carga útil al núcleo de las células, donde algunas de las instrucciones para fabricar proteínas de coronavirus pueden ser malinterpretadas.

Por ello, sugieren que las proteínas resultantes podrían desencadenar trastornos de coagulación de la sangre (que derivan en trombosis) en un pequeño número de receptores.

Si bien esta formación de coágulos es extraña, son potencialmente mortales, acompañados de un bajo recuento de plaquetas, que han llevado a algunos países a detener o limitar el uso de las vacunas de AstraZeneca y Johnson & Johnson.

Sin embargo, tras realizar otras investigaciones, estas arrojaron que en realidad una persona tiene más probabilidades de padecer trombosis contagiándose de covid-19 que con las vacunas antes mencionadas.

La Universidad de Oxford fue la encargada de llevar estos análisis, los cuales arrojaron que “En general, encontraron un mayor riesgo de trombocitopenia, coágulos de sangre en las venas y otros coágulos de sangre arterial raros después de una primera dosis de la vacuna AstraZeneca. Después de la primera dosis de la vacuna Pfizer, encontraron un mayor riesgo de coágulos de sangre en las arterias y accidente cerebrovascular isquémico”, recoge The Guardian.

Julia Hippisley-Cox, epidemióloga y autora principal de este estudio, indicó al medio antes citado que “las personas deben ser conscientes de estos mayores riesgos después de la vacunación Covid-19 y buscar atención médica de inmediato si desarrollan síntomas”.

Asimismo, puntualizó en que los pacientes también deben tener en cuenta que los riesgos son aún mayores y durante un tiempo más prologado, en quienes se contagian de Sars Cov-2.

Riesgo de trombosis en pacientes covid positivo

En este estudio que utilizó datos de más de 29 millones de personas de Inglaterra, razón por el cual se considera el más grande de esta materia, arrojó que habrían “934 casos adicionales de trombocitopenia por cada 10 millones de personas después de la infección, en comparación con 107 después de la primera inyección del jab de AstraZeneca”, según indica un extracto de la investigación.

En el caso de los accidentes cerebrovasculares isquémicos habrían 1.699 casos adicionales por cada 10 millones de personas tras la infección, y sólo exisitían 143 casos en los vacunados con Pfizer.

El análisis, publicado en la revista especializada British Medical Journal, sostiene que: “Las personas pueden desarrollar estas afecciones incluso sin infección o vacunación. Los riesgos descritos en el estudio son los riesgos adicionales que conllevan las vacunas o la infección. Los riesgos asociados con las vacunas también fueron relativamente de corta duración”.

Carol Coupland, investigadora de la Universidad de Oxford, indicó a The Guardian que el riesgo de accidente cerebrovascular aumentó de 15 a 21 días tras la primera dosis de Pfizer, y que en el caso de AstraZeneca, la posibilidad de trombosis aumentó de 8 a 14 días, luego de la primera inoculación.

“Mientras que las asociaciones con la infección parecían darse generalmente durante un período completo de 28 días después de la infección”, sostuvo Coupland.

Si bien aún quedan muchos estudios por realizar, la experta enfatiza en que estos eventos considerados “raros” genera mayor dificultad a la hora de identificar las causas de estos padecimientos, y que conforme avancen las investigaciones, lo ideal es poder determinar qué vacuna es más favorable para cada receptor.