El canciller Alberto Van Klaveren reconoció que la renuncia de la embajadora Susana Herrera no sólo estuvo marcada por el proyecto que presentó a la Gobernación Regional del Bío Bío, sino también por problemas de clima laboral. "El Presidente estaba enterado de los problemas de funcionamiento", aseguró el secretario de Estado.

El ministro de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, detalló los motivos que terminaron con la renuncia de la embajadora chilena en Reino Unido, Susana Herrera.

Desde Cancillería comunicaron este martes que la autoridad presentó su dimisión de forma voluntaria, por lo que ahora será el Encargado de Negocios quien, de manera temporal, asumirá el cargo.

Todo tiene su origen en un proyecto que Herrera presentó al Gobierno Regional del Bío Bío para levantar fondos públicos y privados, pero sin apegarse a los conductos regulares.

En concreto, solicitó el financiamiento para instalar un mercado de maderas en Santa Juana, una de las comunas más afectadas por los incendios y las lluvias del presente año, por montos que alcanzaban los cinco millones de dólares.

De acuerdo a Van Klaveren, esta iniciativa “se apartó de las instrucciones que existen para los embajadores en el manejo de este tipo de situaciones”.

“Se excedió en las competencias que corresponden y fue esa la razón principal que se tomó en cuenta para aceptar su renuncia”, sostuvo.

Renuncia de embajadora: el tenso clima laboral en RU

Sin embargo, esta no fue la única razón que gatilló la salida de Herrera, ya que también había un problema de clima laboral en la Embajada de Chile en Reino Unido.

El canciller expuso ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, donde reveló esta situación.

“Hay también otros elementos que han influido en la determinación de aceptar su renuncia. Y concretamente ahí destaco un elemento que es bastante central en estos momentos de la gestión de nuestras embajadas y que tiene que ver con el clima laboral”, partió señalando Van Klaveren.

En ese sentido, explicó que embajada londinense “tenía un clima laboral complejo que estaba siendo informado a nuestra sede y había ya llamado nuestra atención una serie de situaciones laborales que estaban presentes y que suscitaron incluso el inicio de un sumario de carácter administrativo que no está concluido”.

Además, el ministro afirmó que sólo pudo compartir una vez con Herrera. Esto fue el 17 de abril pasado, casi un mes después de haber reemplazado a Antonia Urrejola, a través de una videoconferencia.

Consultado sobre si Gabriel Boric sabía de este clima al interior de la Embajada en Reino Unido, el secretario de Estado aseguró que “el Presidente estaba enterado de los problemas de funcionamiento”.