El miércoles, en una ceremonia en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, Estados Unidos, la expresidenta Michelle Bachelet juró oficialmente como alta comisionada para los Derechos Humanos (DDHH) del organismo internacional.
La otrora mandataria lo hizo frente al secretario general, Antonio Gutérres, pero asumió su nuevo puesto el sábado 1 de septiembre, a casi seis meses de dejar La Moneda. La entidad fue creada en 1993 y Bachelet es la séptima en liderarla.
El puesto tiene una duración de cuatro años y Bachelet reemplazó al diplomático jordano Zeid Ra’ad al-Hussein.
Este lunes, la dos veces jefa de Estado calificó como “un honor” el formar parte de la ONU y anunció que pretende lograr que los DDHH “sean una realidad para todos” a nivel global.
“Bueno, es un gran honor ser la alta comisionada para los DDHH. Un trabajo complejo, pero fundamental”, dijo en un video compartido en una cuenta oficial de Twitter.
“Yo creo que es uno de los trabajos más importantes en el nivel internacional (…). Proteger los DDHH para cada una de las personas en cada parte del mundo, en cada rincón de la tierra, es complejo, pero es vital”, recalcó.
“Los defensores de los DDHH, las víctimas, miran hacia nosotros buscando que defendamos sus derechos y yo estoy dispuesta a ese desafío”, señaló.
En esa línea, aseguró que buscará que la declaración de DDHH, que este año cumple 70 años, no sólo quede en el papel y prometió trabajar -al igual que sus predecesores- para que se cumplan.
“Es un honor formar parte de @ONU_derechos y espero trabajar con todos ustedes para lograr que los #DerechosHumanos sean una realidad para todos, en todas partes.” — Alta Comishttps://www.youtube.com/watch?v=UmJbQoDuSksionada para los Derechos Humanos Michelle Bachelet en su primer día en el cargo.#StandUp4HumanRights pic.twitter.com/3YXioGkJbF
— UN Human Rights (@UNHumanRights) 3 de septiembre de 2018
La ONU la nominó oficialmente el 8 de agosto y fue ratificada a los dos días del anuncio.
Desde la oposición rechazaron su llegada al ente mundial y algunas figuras de Chile Vamos criticaron -por ejemplo- que siguiera recibiendo su dieta como expresidenta, algo que desde la ONU desestimaron.
A fines de agosto, Bachelet prometió “llevarse a Chile en el corazón” e incluso designó a su exsubsecretaria de Educación, Valentina Quiroga, para que dirigiera la Fundación Horizonte Ciudadano en su ausencia.
Pero la alta comisionada no es la única de su entorno en llegar a la ONU. La última vocera de su segunda administración, Paula Narváez, dejará Chile este 17 de septiembre y regresará a Panamá.
En este país centroamericano, en el cual vivió en 2013, la extitular del Ministerio Secretaría General de Gobierno trabajará como asesora especialista en participación política de las mujeres para América Latina y el Caribe, cargo similar al que tuvo antes en ONU Mujeres.
