David Albertzy Daza, Roger Sebastian Llapo y José Albornoz Martínez tuvieron, entre 2022 y octubre de 2025, un lucrativo negocio: lideraron —según el Ministerio Público— una red de médicos extranjeros que se dedicó a la venta de licencias fraudulentas a diestra y siniestra. ¿Los compradores? Miles de funcionarios públicos que adquirieron los reposos para evitar ir a trabajar, viajar al extranjero o incluso ir a casinos.
Precisamente, según consta en la formalización que se concretó esta semana, el organismo persecutor dio con los implicados tras un cruce de información realizado a partir de los hallazgos de Contraloría.
De acuerdo a información recabada por Bío Bío Investiga, para llevar adelante su empresa ilícita los imputados crearon tres sociedades con domicilio en la región Metropolitana: Maxi Health SpA, SaludVida SpA y Centro Médico Medicilios.
La idea no sólo era dar apariencia de legalidad sino también dotarle de una estructura estable. A través de las mismas, reclutaron y contrataron a médicos de variadas nacionalidades latinoamericanas. Todo —dice la Fiscalía Metropolitana Oriente— a sabiendas de que los permisos no obedecían a una atención real. Hubo días, por ejemplo, en los que los médicos de esas sociedades emitieron una licencia cada dos minutos. Las ganancias fueron multimillonarias. Y las pérdidas para el Estado, aún mayores.
Centros fantasmas
Maxi Health SpA fue constituida en junio de 2022 por David Albertzy. Él es su representante legal y único socio. Y si bien en el papel su giro correspondía al de servicios médicos ambulatorios, la fiscalía descubrió que en la práctica no mantenía ni la infraestructura ni el equipamiento de un centro de atención real. La dirección, en efecto, corresponde a una oficina virtual. Se trata, en todo caso, de una sociedad que ya estaba en la órbita del Ministerio Público. En 2024 ya figuraba en querellas de privados que habían descubierto sus operaciones.
En suma, entre septiembre de 2022 y abril de 2025, Maxi Health emitió más de 47 mil licencias médicas. Casi 46 mil fueron recibidas por afiliados de Fonasa.
Entre los más asiduos compradores de licencias figuran empleados públicos: 5.479 permisos recayeron en 3.032 empleados estatales. Hubo, además, un grupo selecto de 12 servidores que presentaron más de 10 licencias en el periodo analizado.
De todos ellos, se registran 108 funcionarios públicos que utilizaron los documentos para viajar fuera del país, cuando —teóricamente— debían guardar reposo. Otros 30 empleados fiscales utilizaron esas licencias para ir a jugar al casino.
En menos de tres años, la sociedad recibió ganancias por sobre los 1.400 millones de pesos.
Los médicos que esta semana fueron formalizados y que están vinculados a esta sociedad son:
Manuel Tejera Altamar: colombiano, titulado en 1996 en la Universidad Libre de Colombia. Sin especialidad. El día que más licencias emitió fue el 29 de mayo de 2024, con un total de 96. Dicho de otro modo, emitió un permiso cada cinco minutos. Registra viajes a Colombia y EEUU.
Einer Ramírez Florez: cubano, titulado en 2010 en la Fundación Universitaria San Martín de Colombia. Sin especialidad. El día que más licencias emitió fue el 3 de mayo de 2024, con un total de 85. También emitió un permiso cada cinco minutos.
Jorge Galvis Machado: colombiano, titulado en 2016 en la Universidad Metropolitana de Barranquilla. El día que más licencias emitió fue el 2 de diciembre de 2024, con un total de 31. Se demoró 15 minutos por cada permiso.
Edgar Camelo León: colombiano, titulado en 2011 en la Universidad Libre de Colombia. El día que más licencias emitió fue el 7 de mayo de 2024, con un total de 68. Es decir, una cada siete minutos.
Al extranjero con reposo
SaludVida SpA es más reciente. Fue constituida en junio de 2023 por el ciudadano peruano Roger Alfredo Sebastian Llapo. Su giro correspondía a la “atención de salud humana” pero tampoco poseía infraestructura ni equipamiento de un centro médico. Al igual que MaxiHealth, su domicilio era una oficina virtual en Providencia.
En total, desde este centro se emitieron más de 9 mil licencias médicas. El cruce de información entre la Contraloría y el Ministerio Público permitió descubrir que hubo 591 funcionarios públicos que consiguieron más de mil licencias médicas en SaludVida. De ellos, 26 viajaron al extranjero cuando supuestamente debían guardar reposo. Y otros tres, asistieron a casinos de juegos.
Según cálculos del Ministerio Público, las operaciones ilícitas causaron a Fonasa un perjuicio de más de 4.300 millones de pesos. Las ganancias, por otro lado, fueron jugosas para el líder del grupo: entre 2021 y 2024 registra ganancias por más de 728 millones de pesos.
Asociados a este centro médico figuran los médicos detenidos:
Mayra De la Fuente Aguilar: cubana, titulada en 2010 en la Universidad de La Habana. Sin especialidad. El día que más licencias emitió fue el 1 de abril de 2024, con 33. Una cada casi 15 minutos.
Krissy Mora Duarte: venezolana, titulada en 2018 en la Universidad de Los Andes, en Mérida. Sin especialidad. El día que más licencias emitió fue el 17 de octubre de 2024, con 20. Una cada 24 minutos.
Licencia cada tres minutos
Por último —y no menos importante—, aparece Medicilios SpA. Lleva operando en Chile desde noviembre de 2021 cuando fue constituida por el colombiano José Dioximar Albornoz Martínez. Entre 2022 y agosto de 2025 registra la emisión de más de 22 mil licencias médicas. De ellas, casi la totalidad se emitió a Fonasa. Registra ingresos entre 2023 y el año en curso, por más de 260 millones de pesos.
Aquí también eran asiduos los funcionarios públicos: 1.212 servidores estatales consiguieron 3.172 licencias médicas de parte de Medicilios SpA. 11 de ellos aprovecharon de viajar, cuando —en teoría— debían estar bajo reposo. Y cuatro fueron a jugar al casino, según el cruce de información con la Contraloría.
Respecto de este centro médico, el propio Albornoz Martínez figura como su principal emisor de licencias. Se tituló en 2013 en la Universidad Simón Bolívar de Colombia. Otorgó licencias incluso cuando se encontraba en el extranjero. Hubo días, como el 27 de diciembre de 2021, en los que emitió una licencia cada tres minutos.
Prisión preventiva
En base a estos antecedentes, el fiscal de Alta Complejidad Oriente, Álvaro Pérez Galleguillos, formalizó a Manuel Tejera Altamar, Einer Ramírez Florez, Edgar Camelo León, Roger Sebastian Llapo, Krissy Mora Duarte, Mayra De la Fuente Aguilar y Jorge Luis Galvis Machado. A todos les comunicó cargos por emisión de licencias médicas falsas, fraude de subvenciones y asociación delictiva. Todos quedaron en prisión preventiva.
El organismo persecutor también solicitó formalizar a más de 200 funcionarios públicos que adquirieron permisos médicos a los centros de salud aquí señalados. Sus identidades, sin embargo, hasta ahora se manejan en secreto, en una causa que se tramita bajo reserva.
Hasta ahora, sólo se conocen los nombres de los empleados estatales que se hicieron de reposos irregulares en otro centro médico, el de Leonardo González Castro, facultativo detenido en noviembre de este año.
El listado fue revelado esta semana por esta Unidad de Investigación (ver Quiénes son los cientos de funcionarios públicos que serán formalizados por comprar licencias médicas).
Los imputados cumplirán la prisión preventiva en Santiago, mientras que una imputada lo hará en Puerto Montt. Estas medidas cautelares se decretaron junto con la fijación de un plazo de investigación de 120 días. En total, el fraude se empina por sobre los 20 mil millones de pesos.
Las defensas
Posterior a las audiencias celebradas esta semana, desde las defensas criticaron las imputaciones del Ministerio Público, según recoge la Radio Universidad de Chile.
Guido Aguilar, defensor penal público de uno de los imputados, dijo por ejemplo que evalúa apelar a la prisión preventiva, puesto que “con una cautelar menos gravosa se habrían resguardado los fines del procedimiento y el éxito de la investigación”.
Mario Ahumada, defensor de Krissy Mora, en tanto, aseguró que “en la carpeta investigativa solo existen situaciones estadísticas y administrativas que dan cuenta de una alta emisión de licencias médicas, pero no hay informes que acrediten que los diagnósticos sean falsos”.