En los últimos meses, Cathy Barriga -alcaldesa de Maipú- ha recibido varias críticas por algunas de las iniciativas que ha estado impulsando en su municipio y también por su participación en otras actividades.
La realización del libro de la cuenta pública de su gestión de 2017 con más de cien fotografías suyas, la millonaria compra de collares y peluches, y la realización del desafío viral “Kiki Challenge”, le han provocado a Barriga una gran cantidad de críticas por parte de autoridades.
Sin embargo, el haber hecho este “Kiki Challenge” le trajo algo más que cuestionamientos. Tras viralizar el video donde se ve realizando este reto en el Templo Votivo de Maipú, el concejal Ariel Ramos la denunció a Contraloría por el uso de recursos públicos.
El organismo analizó la situación y determinó que sí existió uso de fondos municipales para realizar una actividad que no está relacionada con el cargo de Barriga, por lo que la sancionó con el 10% de su sueldo y una anotación de demérito en el factor de calificación de dos puntos.
Tras esta sanción, Cathy Barriga reaccionó a través de su cuenta de Instagram y señaló que se encuentra “desilusionada del sistema”.
“Mientras la corrupción crece y se apodera de muchos municipios de nuestro país, se sancionan 23 segundos de baile, denunciada por las mismas personas que me han hostigado este año nueve meses de gestión, con injurias y calumnias”, añadió.
La autoridad comunal además mencionó que se encuentra en un “mundo al revés”, ya que “mientras uno trabaja de manera honesta, quienes no lo han hecho nunca, se ven amenazados y quieren destruir una gestión impecable donde las obras, los proyectos y las actividades hablan por sí solas”.
“Tengo la convicción que mis vecinos han visto día a día cómo Maipú Renace”, finalizó Barriga.
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