El Gobierno justificó la orden de desalojo en la Casona Lopetegui, que es la más antigua de Valdivia para así evitar que el puente Cochrane siga “estancado”. El Estudio de Impacto Ambiental del proyecto sigue en calidad de desistido.

A través de un comunicado de prensa, la seremi del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, Andrea Wevar, manifestó que con la solicitud de desalojo otorgada por el Tribunal, no tratan de vulnerar los derechos de nadie, ya que han atendido los requerimientos de los ocho copropietarios del inmueble.

En tanto, manifestó que la responsabilidad como Gobierno es garantizar los derechos de todos los habitantes del territorio, y siendo Valdivia una capital regional en crecimiento y con problemas de conectividad, es fundamental que este proyecto no se detenga.

El intendente César Asenjo, indicó que uno de los acuerdos planteados por el presidente Sebastián Piñera es el desarrollo integral del país, por lo que el proyecto del Puente Cochrane es primordial y no puede quedar estancado.

La máxima autoridad regional lamentó que no se haya podido llegar a un acuerdo con estas familias y aunque no precisó la forma, aseguró que se agotarán todas las instancias para que no se vean perjudicadas en este proceso.

El puente entre los sectores Los Pelúes y Cochrane ha tenido distintos reveses tanto en sus diseños y estudios, proyecto que ha cambiado tres veces de nombre para someterse al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.

Actualmente se encuentra aún en calidad de desistido y sin poder ser ejecutado, debiendo resolver temas como el de la Casona Lopetegui o las embarcaciones encontradas bajo el río, justo por donde debe pasar el viaducto.