Destacando la ilegalidad de la medida propuesta y que la ley contempla otras medidas para el control de la población de perros abandonados, la Corte de Apelaciones de Antofagasta rechazó la solicitud de la Municipalidad de San Pedro de Atacama que buscaba practicar eutanasia masiva a perros abandonados en la comuna.

La Corte de Apelaciones de Antofagasta -en un fallo unánime- rechazó el recurso de protección interpuesto por la Municipalidad de San Pedro de Atacama sobre practicar eutanasia a perros abandonados en la comuna.

Recordemos que la solicitud buscaba instruir a la Seremi de Salud aplicar eutanasia masiva a 4.500 canes. Esto, argumentando que son potenciales portadores de infecciones y del vector de la rabia.

Aún así, el tribunal determinó que no existió un acto ilegal o arbitrario por parte de la autoridad sanitaria que justificara la acción.

El fallo por perros en San Pedro de Atacama

Además, según el fallo, la autoridad sanitaria sólo tiene facultades para retirar y sacrificar perros o comunitarios en casos de rabia o posibles brotes de esta enfermedad, situaciones que no se aplican al caso actual.

La decisión resalta las acciones ya realizadas por la Seremi de Salud, incluyendo intervenciones en el sector tras accidentes de mordeduras y la coordinación con Carabineros, además de la Municipalidad de San Pedro de Atacama, para abordar la problemática.

Se menciona específicamente el ataque de una jauría a una madre y su hijo menor, donde se identificaron 5 caninos, todos con dueños, microchip y vacunas al día.

La Corte subrayó que el recurso de protección no es el medio adecuado para declarar derechos o ejecutar políticas públicas como la eutanasia masiva de perros abandonados.

Asimismo, enfatizó que es responsabilidad del municipio adoptar las medidas necesarias para cumplir con la Ley N°21.020, la que prohíbe el sacrificio de animales como método de control poblacional. Esa es una prohibición que se extiende a todos los servicios públicos.

Finalmente, el dictamen destaca la complejidad de gestionar la población de perros abandonados y la necesidad de soluciones humanitarias que respeten la legislación vigente.