Este miércoles fueron formalizados Francisco Silva y Johanna Hernández Vicuña, exesposa de Nibaldo Villegas, el profesor de Villa Alemana que desapareció el pasado 10 de agosto y cuyo torso fue encontrado flotando días más tarde en el mar, en un escabroso caso que ha conmocionado al país.

De acuerdo a los antecedentes judiciales, el crimen habría sido perpetrado por su exesposa junto a su actual pareja, en la casa de la víctima.

Villegas trabajaba como profesor de computación en el Centro de Educación Integrada de Adultos (CEIA) de Quilpué. Estaba separado hace algún tiempo, luego que su esposa lo dejara. Se encontraba en un proceso de divorcio y contaba con la tuición por 90 días de su hija.

De acuerdo a su familia, era un hombre tranquilo y responsable, por lo que sorprendió que la noche del 10 de agosto, en que se suponía iba a una reunión con compañeros de trabajo, no llegara a buscar a su hija.

Por ello, al día siguiente su hermano, Edson Villegas, y la esposa de éste fueron a la casa del docente, donde encontraron la chaqueta de Nibaldo –la misma que usaba esa jornada– guardada, las llaves colgadas detrás de la puerta y las cosas que iba a llevar a la junta dentro de la vivienda. Además había un vaso roto en el piso.

Aún más raro, una vecina aseveró que la noche de la desaparición escuchó ruidos en la casa de golpes, muy potentes, que generó que los perros, generalmente pacíficos, ladraran.

Posteriormente a la inspección que Edson Villegas hizo de la propiedad, la exesposa de Nibaldo llegó al sitio, con una mochila, según contaron familiares. De acuerdo al relato de Edson, la mujer se puso a llorar cuando él le prohibió quedarse.

Días después, el 15 de agosto por la tarde, fue encontrado el torso flotando en el mar, sin extremidades. La Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) comenzó un catastro de las personas desaparecidas en la zona.

Después de efectuar los exámenes genéticos respectivos, el lunes finalmente se confirmó que el torso encontrado flotando cerca del Muelle Prat, era el del profesor.

Tras los primeros peritajes, las sospechas empezaron a apuntar a la exesposa de Villegas, pese a la serie de publicaciones en Facebook llamando a buscar a su excónyuge después de su desaparición y también lamentándose cuando se comprobó su muerte.

Pero la policía tenía otros antecedentes, como el tráfico de llamadas entre ambos, logrando determinar que se habían encontrado la noche de su desaparición.

Finalmente, la exesposa y su actual pareja fueron detenidos durante la madrugada del miércoles, tras comprobarse su participación científicamente, mediante la investigación de la Brigada de Homicidios de Valparaíso.

Según el subcomisario Gabriel Alarcón, una de las hipótesis es que el docente fue drogado y después asesinado y descuartizado. No obstante, aún queda esperar los resultados de los análisis toxicológicos.

Según el fiscal adjunto de la región de Valparaíso, José Miguel Subiabre, los acusados habrían inmovilizado a Villegas “asestándole golpes cortopunzantes en la zona torácica, que afectaron su integridad, ocasionándole la muerte. Acto seguido, procuraron la desaparición del cuerpo”.

“Ambos declaran y reconocen los hechos, se posicionan en el lugar, indican el concierto y que se produce este desmembramiento en su domicilio, en la cama de la víctima”, agregó.

De acuerdo al policía, después los restos habrían sido trasladados al sector de Laguna Verde, al sur de la región de Valparaíso.

Durante el trayecto, Silva habría sacado dinero desde un cajero automático en Quilpué con la cuenta del profesor asesinado, según reveló una grabación de una cámara de seguridad.

En las imágenes se le aprecia con una chaqueta que pertenecía a Villegas, quizá en un intento por desviar la atención de la policía.

“Ellos continuaron con su vida cotidiana y el martes 14 nuevamente se conciertan y analizan que los restos podrían ser hallados. Vuelven, los terminan de cercenar y se dirigen a un sector cercano para arrojarlos al mar”, agrega el fiscal Subiabre.

Precisamente, gracias a los datos que ambos acusados entregaron, este miércoles la PDI encontró restos óseos calcinados que podrían corresponder al cadáver, en el sector Laguna Verde.

El subcomisario Roberto González, de la Brigada de Homicidios de la PDI, detalló que se encontraron unos marcos de lentes, un celular, un pendrive, además de una sábana cubierta de sangre. Todo quemado en una fogata donde también se hallaron los restos.

“Ellos manifiestan que efectúan una fogata en el sector de la playa Las Docas donde habrían tratado de ocultar el cuerpo. No obstante, no pudieron y habrían vuelto y retirado las partes y las lanzaron al mar”, manifestó el subcomisario Roberto González.

Sobre el celular, el policía dijo que se está intentando periciar, aunque está bastante dañado producto del fuego.

“Se van a continuar unos descensos en un sector que todavía nos falta”, expresó González.

Pero mientras continúan las diligencias policiales, aún se mantiene la interrogante respecto a las razones de los imputados para cometer este crimen.

De hecho, según comentó el fiscal Jose Miguel Subiabre, la actual pareja de la imputada estaba al tanto que la mujer mantenía encuentros con su exesposo.

Por lo mismo, las hipótesis apuntan a un posible intento por apropiarse de los bienes del fallecido profesor o recuperar la tuición de la hija, que estaba al cuidado de Villegas.