Dos mujeres murieron quemadas esta semana en Argentina y una tercera está en grave estado tras ser rociadas con alcohol y prendidas fuego presuntamente por sus parejas, en una modalidad de asesinatos de mujeres que viene en aumento en el país sudamericano, según estadísticas.

“De 260 mujeres y niñas que fueron asesinadas en 2010, once de ellas fueron incineradas, con un incremento (de esos casos) del 10% respecto al año anterior”, dijo este sábado Fabiana Tuñez, de la ONG La Casa del Encuentro, que se ocupa de la violencia de género.

Una joven de 23 años que había resultado con quemaduras en el 50% de su cuerpo el martes tras ser rociada con alcohol y prendida fuego en medio de una discusión con su pareja, murió este sábado después de una agonía de cuatro días, informó la policía.

Su caso se suma al de otra mujer de 32 años muerta el viernes tras resultar quemada en el 70% de su cuerpo luego de ser prendida fuego presuntamente por su pareja en un barrio del sur de la capital argentina.

Una tercera víctima está grave tras ser rociada y prendida fuego por su marido frente a sus dos pequeños hijos el viernes en Wilde (periferia sur), informó la policía.

“Luego de la discusión, la mujer salió a la calle envuelta en llamas y fue auxiliada por vecinos”, dijo el comisario Jorge Bonino.

La mujer sufrió graves quemaduras en el rostro, brazos, cuello y manos, mientras su marido fue arrestado por “tentativa de homicidio”.

“Hay un incremento general de la violencia hacia las mujeres, en lo que va del año ya tenemos varias víctimas por incineramiento”, precisó Tuñez quien reclamó un reencuadramiento legal para estos casos.

“La justicia demora la investigación esperando que la víctima pueda declarar, entonces la orden de allanamiento del lugar donde se produjo el hecho demora demasiado tiempo, dándole la posibilidad al agresor de modificar la escena del crimen”, dijo.

Además “la mayoría de las mujeres incineradas nunca pueden llegar a declarar y el femicidio queda impune con la excusa siempre de que fue un accidente”, explicó.

Para evitar estas situaciones la ONG reclama que el femicidio “sea una figura penal autónoma, con el antecedente de que ya existe en Guatemala, Costa Rica y recientemente en Chile”, señaló.

El año pasado la prensa argentina dio gran despliegue al caso de Wanda Taddei, la esposa del ex baterista del disuelto grupo de rock Callejeros, Eduardo Vázquez, muerta en febrero de 2010 tras ser prendida fuego por su pareja, quien está en prisión imputado por homicidio.