Este lunes, la Fiscalía Metropolitana Oriente confirmó que el sicario venezolano Alberto Carlos Mejía, principal imputado por el asesinato del “Rey de Meiggs” en Ñuñoa, salió del país.
La información sobre la salida del sicario acusado de asesinar a José Felipe Reyes Ossa, fue comunicada por el Ministerio Público y el Departamento OS9 de Carabineros, quienes investigaron sobre los últimos movimientos de Mejía durante las horas posteriores a su excarcelación desde el penal Santiago 1, ocurrida el pasado jueves 10 de julio.
El caso, que ya cuenta con tres imputados (dos de ellos en prisión preventiva), está siendo investigado por la Fiscalía Oriente. Las diligencias, lideradas por el Fiscal de Alta Complejidad Oriente, Miguel Ángel Orellana, continúan en curso.
Por el momento, Fiscalía informó que sigue con las investigaciones para dar con la ubicación de Mejía. Se espera coordinar con organismos internacionales para lograr su captura y eventual extradición a Chile.
A su vez, el organismo también detalló que está investigando -junto a Crimen Organizado, Cibercrimen, BIPE y Anticorrupción- los hechos que permitieron que el imputado saliera de prisión preventiva tras solo 24 horas en el penal Santiago 1.
Se fugó a Perú
A pesar de que aún se desconoce su paradero, el imputado se fugó hacia Perú tan solo 48 horas después de salir de prisión.
El sujeto inició su día con un recorrido en micro desde la Penal de Santiago 1 hacia Estación Central, donde solicitó un vehículo a través de una aplicación de transportes, donde pagó $2.5 millones para llegar hasta Iquique, lugar donde estuvo alojado en un hostal.
Posteriormente, continuó su viaje hacia Arica, donde finalmente cruzó la frontera hacia Perú a través de un paso no habilitado, evadiendo cualquier tipo de control migratorio.
Liberado por error
Cabe recordar que, el pasado 9 de julio, Alberto Carlos Mejía, quien en un comienzo fue identificado como Osmar Ferrer, fue formalizado por el asesinato del conocido empresario del barrio Meiggs. Junto a Mejía, fueron imputados otros dos individuos, todos de nacionalidad venezolana y con presuntos vínculos con la banda criminal el Tren de Aragua.
El Octavo Juzgado de Garantía de Santiago había determinado la prisión preventiva para Mejía. Sin embargo, una serie de errores administrativos y de comunicación desencadenaron su posterior liberación.
¿Qué pasó?
-El 9 de julio, a las 20:17, la jueza Irene Rodríguez emitió un primer dictamen con un erro de tipeo en el nombre del sicario.
-A las 20:25, se emitió un segundo documento para corregir la identidad, pero esta nueva resolución dejaba en libertad al sujeto.
-Finalmente, a las 20:28, se emitió una tercera resolución con el nombre que la justicia creía correcto hasta ese momento.
Pese a que Gendarmería fue notificada de esta situación a través de un correo electrónico enviado a las 14:13 del 10 de julio, unas horas más tarde -a las 20:00- Mejía quedó en libertad.
Luego, Interpol revisó las huellas dactilares del imputado, revelando que su nombre real era Alberto Carlos Mejía Hernández y que había utilizado una identidad falsa durante toda su estadía en Chile.
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