Fue la noche del martes que desconocidos llegaron hasta distintas unidades policiales capitalinas para atacarlas con objetos contundentes como piedras, fuegos artificiales y elementos incendiarios.

Los cuarteles afectados fueron la 20° Comisaría de Puente Alto, la 55° Comisaría de Pudahuel, la Subcomisaría de Peñalolén, la 7° Comisaría de Renca y la 46° Comisaría de Macul.

En estas dos últimas hubo 10 y 7 detenidos, respectivamente. Sin embargo, la Fiscalía los dejó en calidad de apercibidos, por lo que recuperaron la libertad.

El Ministerio del Interior, a través de la subsecretaria de Prevención de Delito, Katherine Martorell, anunció que el Gobierno presentará las querellas que correspondan para que los detenidos respondan ante la justicia.

El general Enrique Bassaletti, jefe subrogante de la región Metropolitana, aseguró que estos incidentes fueron “concertados y organizados”. Sin embargo, mencionó que no tienen pruebas.

Una de las comunas más afectadas por los ataques a comisarías ha sido Pudahuel, quienes desde la semana pasada -tras el atropello de un joven por parte de un vehículo policial- han registrado una serie de incidentes.

Por lo mismo, el alcalde Johnny Carrasco hizo un llamado a los vecinos a “aislar” a los sujetos que están provocando los hechos.

Además, realizó un llamado a los padres “para que se hagan un poco más responsables de sus hijos. En Pudahuel las personas que estaban apedreando la 55° Comisaría eran niños de 8, 10 y 12 años. Si queremos mantener una ciudad más tranquila, si queremos una comisará que se dedique a las tareas para las cuales está, necesitamos cuidarla”.

Finalmente, el Gobierno se comprometió a convocar una mesa multidisciplinaria con los alcaldes de las comunas que han sido víctima de los ataques a cuarteles policiales, la cual será liderada por el intendente de Santiago, Felipe Guevara.

Ante esto, Guevara mencionó que en la reunión les solicitaron colaboración y ayuda para recuperar los espacios públicos y coordinación con las policías.