Medio centenar de funcionarios de Conaf y ocho aeronaves se desplegaron este viernes producto de un incendio forestal en la comuna de San Clemente. El inicio de las llamas podría tener relación con una quema de plantas de marihuana llevada a cabo por personal de Carabineros en la zona. Para aclarar la situación, la policía dispuso del inicio de una investigación interna y dio cuenta de los hechos al Ministerio Público.
Carabineros de Chile ordenó una investigación administrativa interna, luego de que se originara un incendio forestal en cercanías a un lugar donde habían realizado una quema de marihuana.
De acuerdo con información recopilada por BioBioChile, todo ocurrió en el marco de una investigación del departamento OS-7 de la policía uniformada que permitió detectar una plantación de cannabis sativa en el sector “Vilches” de la comuna de San Clemente, región del Maule.
Desde la institución policial explicaron a este medio que, como parte del procedimiento, solicitaron autorización a la fiscalía para proceder con la quema de los estupefacientes, junto con dar aviso a la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
Sin embargo, el operativo no habría resultado según lo planeado. Esto, porque una vez terminada la quema, se originó un incendio forestal en las cercanías, situación de la que dieron cuenta efectivos de la institución que se mantuvieron en el lugar de forma preventiva.
Cerca de las 14:00 horas de este viernes, la alerta por el incendio obligó a la movilización de recursos de Conaf. En concreto, se materializó la concurrencia de dos aviones, dos helicópteros y tres brigadas terrestres, además de personal técnico del organismo estatal, totalizando el despliegue de medio centenar de funcionarios.
En paralelo, la empresa Arauco -dueña del predio donde se realizó la quema de plantas- dispuso de un helicóptero pesado “Super Puma”, tres helicópteros, un skidder, dos aviones y dos brigadas terrestres para el combate de las llamas.
Conaf informó a BBCL Investiga que, hasta el cierre de este artículo, el fuego había arrasado con poco más de media hectárea de pinos y matorrales.
Consultados por lo ocurrido, desde Carabineros de Chile confirmaron que la Prefectura de Talca instruyó el inicio de una investigación administrativa interna, junto con el ingreso de una denuncia ante el Ministerio Público para que se indague lo ocurrido.
Desde la policía aclaran que la instrucción de la indagatoria interna y la denuncia a fiscalía no significa que necesariamente haya responsabilidad de ellos, lo que se determinará una vez se tengan resultados de ambas investigaciones.
Por su parte, desde el Ministerio Público indicaron a BBCL que aún no hay antecedentes de que el origen del incendio haya sido producto de la quema de las plantas de marihuana. Al mismo tiempo, confirmaron que hubo autorización para la incineración que previamente Carabineros coordinó con Conaf.
“Amago de incendio”
Respecto de esta situación, el prefecto de la Prefectura de Carabineros de Talca, coronel Juan Ulloa Rebolledo, detalló que el “amago de incendio” se produjo a unos 30 metros de donde se realizó la quema por parte de personal del OS-7 tras el hallazgo de 1.700 plantas.
Según indicó el oficial, por tratarse de un lugar de difícil acceso el fiscal autorizó que las matas fueran incineradas en el lugar y que 20 de estas fueran remitidas al Instituto de Salud Pública (ISP) para un posterior análisis.
La quema, aseguró el coronel, “se realiza conforme a protocolo, se le informa a una persona de Conaf y se le mandan las coordenadas para solicitar la autorización de esta quema, indicando que como estaba nublado y no había ningún foco de incendio en las inmediaciones, se procediera”.
El prefecto añade que “posterior a esta quema pasan unos 30 minutos, el personal se mantenía en el lugar, y a 30 metros más o menos de donde se había provocado la incineración empieza a salir humo”.
En efecto, la situación obligó a que se trasladara al lugar personal de Conaf para controlar la emergencia “para apagar este amago de incendio en el cual se quema media hectárea de matorrales y arbustos, sin haber provocado otros daños”.
“Este hecho también fue informado al fiscal y también se hizo un parte de esta situación. Lo importante es que estas 1.700 matas de marihuana es una cantidad importante de dosis que se saca de circulación”, subraya Ulloa.
