El pastor evangélico que fue detenido tras convocar y liderar un encuentro religioso en Hualpén, fue formalizado la jornada de este domingo y quedó con las medidas cautelares de arraigo nacional y prohibición de realizar cultos y acercarse al templo.

Lo anterior pese a que la detención fue declarada ilegal por el Tribunal de Garantía de Talcahuano.

Fue un llamado anónimo, el que alertó a Carabineros acerca de la celebración de un culto en un pequeño inmueble, donde funciona la iglesia Misión Evangélica Pentecostal Cristo Viene Pronto.

En el lugar había entre 45 y 49 personas, contraviniendo la normativa sanitaria, que si bien fue alzada parcialmente por la Seremi de Salud, luego fue restablecida por al Corte de Apelaciones de Concepción.

La jueza Antonia Godoy definió la detención como ilegal, precisamente debido a esta confrontación judicial, ya que el detenido no tenía obligación de conocerla, indicó el defensor penal público Ricardo Terán.

El fiscal Mario Elgueta señaló que el pastor igualmente fue formalizado, más allá de que no estuviese en obligación de conocer los resultados de fallos judiciales.

El intendente del Bío Bío, Sergio Giacaman calificó la situación como “irresponsable” y afirmó que presentarán acciones legales por poner en peligro la salud pública.

Además, la autoridad se refirió a otros hechos ocurridos este fin de semana, una de las cuales obligó a la clausura de un pub en Concepción.

El presidente de la Coordinadora Evangélica Regional, Juan Marcos Godoy, manifestó su molestia, ya que el actuar del pastor no sólo vulnera las disposiciones sanitarias, sino que también contradice los acuerdos de la orden.

Godoy dijo no tener registro del pastor detenido ni tampoco de la iglesia donde se realizaba el culto. Además, llamó a mantener los cultos online.

El pastor, identificado como Nestor Rivera Ortega de 40 años, tiene antecedentes policiales que datan del año 2001 por el delito de hurto en calidad de frustrado.

Entre los asistentes al culto hubo un menor de 14 años y una mujer de 71, quien habita en el sector Costanera de San Pedro de la Paz. También concurrieron residentes del sector Pedro del Río Zañartu y de Talcahuano, pero la mayoría de los asistentes residen en Hualpén.

Se informó que ninguno de los asistentes al encuentro religioso estaba contagiado con coronavirus.