Con restaurantes cerrados y un control del acceso como medidas de prevención, los habitantes de Tumbes están intentando disminuir el riesgo por coronavirus. El cierre inicial de la caleta pesquera de Talcahuano fue declarada ilegal por el jefe comunal y el gobernador de Concepción.

La decisión de la Junta de Vecinos de la caleta Tumbes se conoció a través de un video donde se veía a un grupo de personas instalando un letrero que prohibía el acceso a un sector conocido como atractivo gastronómico.

El alcalde de Talcahuano, Henry Campos, confirmó la medida, informada personalmente por los dirigentes vecinales, aprovechando la oportunidad para manifestar su rechazo y advertir sobre la ilegalidad del cierre de la caleta.

En igual sentido se pronunció el gobernador de Concepción, Robert Contreras, al subrayar en que las cuarentenas obligatorias en algún territorio nacional las ordenaba la autoridad sanitaria.

Ante el rechazo de parte de las autoridades a la idea de restringir la circulación libre hacia Tumbes, es que los vecinos cambiaron finalmente de idea y lo que decidieron fue cerrar los restaurantes.

La medida es comunicada a los visitantes para disuadirlos de ingresar a la caleta, y a los que insistieran se les pedía tomar las medidas para disminuir los riesgos de contagio del coronavirus, según explicó la presidenta de la junta de vecinos, Marcela Daza.

La idea es que el cierre de los restaurantes se extienda por las próximas dos semanas, tiempo en el que pedirán a los visitantes no ingresar y a los habitantes de la caleta que salgan a Concepción o Talcahuano tomar las medidas para no contagiarse, y regresar a Tumbes con las consecuencias que ello podría causar.