Durante esta tarde, la Cámara de Diputados rechazó el proyecto de ley que buscaba eliminar, de manera gradual, la pesca de arrastre de la merluza común. La iniciativa planteaba una fórmula para darle sustentabilidad al recurso marino, alejando esta práctica a un mínimo de 30 millas de la costa.

El texto, modificaba la Ley 18.892, General de Pesca y Acuicultura, prohibiendo de manera expresa la “extracción de la especie merluccius gayi gayio, merluza común, con el arte de pesca comprendido como ‘arrastre’, ya sea de media agua o de fondo”.

En primera instancia, la iniciativa decía que esta técnica de extracción podía ser utilizada “única y exclusivamente en los polígonos que definen las actuales huellas de pesca proyectadas y definidas por la autoridad pesquera respectiva”

Sin embargo, en abril pasado, la comisión de Pesca aprobó una indicación que sostenía que “la huella del arrastre no operará entre las costas y las 30 millas marinas, las que se medirán desde las líneas de base normales, dentro del espacio comprendido entre el límite norte de la República hasta el paralelo 56° de latitud sur, al límite de la región de Magallanes, abarcando, de igual forma, las islas, su alrededor y las aguas interiores del país”.

La iniciativa contó con 74 votos a favor y se requerían 78 para que fuera despachado al Senado. Según diversas voces, no se alcanzó el quorum mínimo de aprobación del texto en su conjunto debido a esta última indicación.

Debate del proyecto

El ministro de Economía, Lucas Palacios, sostuvo en el debate del proyecto que la aplicación de la norma, tal como salió de la Comisión de Pesca, implicaba en la práctica el cierre de ocho plantas procesadoras y la pérdida de mil 150 empleos directos, además de 3 mil millones de pesos menos de ingresos fiscales, entre otros impactos.

El diputado Miguel Ángel Calisto (DC), de la región de Aysén, aseveró que “es una especie de letra chica para destruir la actividad productiva. En el caso de Aysén, si eliminamos el arrastre, provocaríamos que la región perdiera el 30% del PIB de su actividad económica, porque la actividad industrial de Aysén trabaja en conjunto con los pescadores artesanales”.

En tanto, los que estuvieron a favor de la iniciativa, con la nueva redacción planteada por la comisión de Pesca, argumentaron que es necesario garantizar la preservación del recurso y el cuidado del medioambiente.