Según los últimos resultados de la encuesta Plaza Pública de Cadem, realizada durante la primera semana de noviembre, un 85% de los chilenos apoya el Plan Humanitario de Regreso Ordenado que impulsó el Gobierno, asimismo un 88% cree que es difícil para un haitiano insertarse social y laboralmente en Chile.
A diferencia de los migrantes colombianos, peruanos y venezolanos, la brecha idiomática que tienen los provenientes de Haití, pudo ser la causante de esta percepción sobre inserción laboral y social.
Por otro lado, un 46% considera positiva la llegada de inmigrantes extranjeros al país, cifra que se mantuvo estable desde febrero de 2018.
En contraste, un 40% considera que la llegada de inmigrantes es negativa, porcentaje que aumenta a 50% entre los mayores de 55 años y asciende aun 52% entre los grupos socioeconómicos más bajos.
Respecto de la percepción interna, un 67% reconoce que los chilenos son discriminadores hacia los inmigrantes, mientras que sólo un 30% declara que son tolerantes.
Desarrollo y políticas públicas
No obstante, pese a las percepciones negativas, un 94% está de acuerdo con que los hijos de inmigrantes deben recibir salud y educación, igual que los niños chilenos.
Así, un 91% apoya el arribo de médicos extranjeros especialistas. Un 69% considera que los inmigrantes son una oportunidad de desarrollo y productividad para el país, mientras que un 66% cree que aportan al enriquecimiento cultural.
Sin embargo, a la hora de hablar de políticas de migración, un 82% apoya el cambio hacia una política restrictiva.
En dicho contexto, un 85% estuvo de acuerdo con el Plan Humanitario de Regreso Ordenado, organizado por el Gobierno y que consistió en el retorno de ciudadanos haitianos a su país, con la condición de no volver a pisar Chile en los próximos nueve años.
