El proyecto de reforma a las isapres está en redacción, sería presentado ante el Congreso el último trimestre de 2018 y, por el contrario a como se estila actualmente, propondrá costos diferenciados por cada usuario, además de la solidarización del sistema.

En conversación con La Tercera, el ministro de Salud, Emilio Santelices, detalló que la iniciativa creará un “plan universal” con todas las coberturas, precio que será determinado para cada persona por una entidad pública externa en base a su género, edad y la morbilidad, es decir, la cantidad de personas que se enferman durante un tiempo y lugar determinados.

Al mismo tiempo, se implementará un fondo de compensación entre las isapres “a partir de los riesgos de la cartera de afiliados que cada una tenga”. Lo anterior, con el objetivo de impulsar la competitividad y simplificar la movilidad.

El monto final a pagar dependerá del costo de la red de prestadores y la hotelería a elegir, aunque la atención a recibir “será la misma”, aseguró Santelices. “El diferencial de precio tú lo vas a justificar por la hotelería, porque vas a estar en una pieza de 50 metros cuadrados o en una de 500”, ejemplificó.

“Tenemos que avanzar en el concepto de solidaridad en una lógica de seguro social de salud y eso significa establecer un mecanismo de compensación, de manera que se solidarice el riesgo en el sistema de isapres”, sostuvo el ministro.

Santelices destacó el carácter solidario del proyecto que impulsa por el fin a la discriminación a las mujeres -quienes pagan mucho más que los hombres- y por la diferenciación de precios, la que podría bordear los 3 mil pesos.

El secretario de Estado también indicó que el proyecto busca aunar voluntades sanitarias y financieras. “El asegurador, al tener que quedarse con los pacientes, tendrá que buscar contratos virtuosos con los prestadores para que también cuiden a los enfermos”.

“Hoy tenemos el peor de los mundos: un asegurador que no quiere que los pacientes se enfermen y un prestador que incentiva el consumo”, lamentó.

El presidente de la Asociación de Isapres, Rafael Caviedes, dejó claro que las isapres deben ser autónomas e independientes para dictar los valores que estimen convenientes. “(…) Ese valor tiene que ser competitivo, por precio, calidad de servicios y la red que ofrecen a los usuarios. Estando ese principio claro, el modelamiento del plan es algo que se podrá resolver”, señaló.

Además, el ejecutivo dijo esperar que la declaración de salud que actualmente todos los cotizantes firman siga existiendo para evitar que afiliados a Fonasa se inscriban en una isapre, usen sus beneficios y luego vuelvan al fondo estatal.