El gobierno de Estados Unidos, liderado por Donald Trump, calificó como “una farsa” las elecciones realizadas en Venezuela y en las cuales se determinó la continuidad de Nicolás Maduro en la presidencia. En esa línea, advirtieron “medidas” al respecto.

“Estados Unidos está del lado de las naciones democráticas en respaldo del pueblo venezolano y tomará rápidas medidas económicas y diplomáticas para apoyar la restauración de su democracia”, dijo el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo.

“Hasta que el régimen de Maduro restablezca un camino democrático en Venezuela a través de elecciones libres, justas y transparentes, el gobierno enfrenta el aislamiento de la comunidad internacional“, agregó.

En a misma línea, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, denunció que las elecciones en Venezuela fueron una “farsa” y que Washington evalúa nuevas sanciones contra el gobierno de Maduro.

“La elección de Venezuela fue una farsa, ni libre ni justa. El resultado ilegítimo de este proceso falso es un golpe más a la orgullosa tradición democrática de Venezuela”, dijo Pence en un comunicado.

“Estados Unidos no se quedará de brazos cruzados mientras Venezuela se desmorona y la miseria de su valiente pueblo continúa”, finalizó.