La isla lleva cerrada casi 24 meses (desde marzo de 2020) y casi el 90% de sus habitantes dependen del turismo. Aseguran contar con todos los protocolos para retomar la actividad y salir a flote del golpe económico que viven por esta situación.

El turismo es una de las principales actividades económicas de Rapa Nui, que genera ingresos y trabajo a un número significativo de sus habitantes ya que es un destino atractivo a nivel mundial.

Por la pandemia, la isla lleva cerrada casi 24 meses (desde marzo de 2020) y “sin ninguna actividad turística, sin visitantes”, lo que ha provocado un “tremendo drama humano y social”, acusó la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur, emplazando al Gobierno a revertir esta situación antes que culmine su mandato.

El gremio indicó que “todas las esperanzas estaban puestas en el anuncio que había realizado el Gobierno de que los visitantes podrían volver a partir del 1 de febrero pasado”. Pero la llegada de la variante Omicron y el alza de contagios en Chile llevó a que la autoridad sanitaria suspendiera la apertura, sin establecer una nueva fecha.

Si bien adhieren a las acciones que buscan cuidar la salud de las personas, en la isla “ya no existe ayuda que sirva”, afirmó Helen Kouyoumdjian, vicepresidenta ejecutiva de Fedetur, “porque no hay ninguna actividad económica que resista de pie estando prácticamente dos años sin funcionar”, agregó.

“Le pedimos al Gobierno que fije una fecha de apertura para el ingreso de turistas a Isla de Pascua antes de que termine su mandato; y así pueda entregar certezas al sector en ese destino”, sostuvo Kouyoumdjian.

Las empresas turísticas que operan allá, complementó, son en su mayoría micro y pequeños emprendimientos “que dependen de la llegada de visitantes al territorio insular”.

En Fedetur argumentaron que una de las condiciones que había puesto el Ejecutivo para abrir la isla a los turistas era que “el 80% de las personas en el país estuviesen vacunadas con su esquema completo, condición que ya se cumplió”.

“Mantener la isla cerrada a los turistas es profundizar la desesperanza en la zona, ya que una gran parte de los habitantes de ese destino dependen del turismo para vivir”, remarcó Kouyoumdjian.

En tanto, Edgard Hereveri, presidente de la Cámara de Turismo de Rapa Nui, manifestó que “nos hemos estado organizando los últimos dos años, con el objetivo de preparar de la mejor manera posible la reapertura del turismo en nuestro territorio de acuerdo a los protocolos, y esta postergación nos cayó como un balde de agua fría”.

José Pakomio, presidente de la Cámara de Comercio de Valparaíso y Rapa Nui, comentó que “casi el 90% de quienes residen en Rapa Nui depende directa o indirectamente del turismo, los que han visto muy disminuidos sus principales ingresos estos últimos dos años. A este drama, se suma el drástico aumento de los costos de transportes provocados por la pandemia, ya que ha disminuido la demanda de carga del comercio local”.

Pakomio señaló, por último, que necesitan un “plan claro de reactivación económica para la isla”, que les permita “poder iniciar pronto nuestra anhelada recuperación, y para eso es clave que la isla reabra a los visitantes y el turismo vuelva a funcionar y generar empleos e ingresos a los habitantes de Rapa Nui”.