Una condena transversal se generó el viernes 20 de noviembre cuando organizaciones de diversidad sexual denunciaron que la animita de Daniel Zamudio en el Parque San Borja había sufrido un ataque homofóbico por parte de desconocidos.

Pero la Fundación Daniel Zamudio quiso indagar más en lo sucedido y, en coordinación con el Frente de la Diversidad Sexual y la Oficina Antidiscriminación de la Municipalidad de Santiago, solicitaron la revisión de las imágenes registradas por las cámaras de seguridad ubicadas en el parque. Ahí se percataron que no hubo ataque, sino que fueron unas velas encendidas las que provocaron el accidente.

“Agradecemos todas las muestras de apoyo recibidas por las organizaciones y la sociedad civil. Miembros de nuestra Fundación fuimos este fin de semana a limpiar la animita de Daniel. Valoramos el esclarecimiento de los hechos y el saber que no se trató de un acto de odio a su memoria”, manifestó Iván Zamudio, presidente de la institución.

La condena

“Es una situación dolorosa ver la animita quemada, pues es como recordar el sufrimiento y la tortura que una persona padeció injustamente en dicho lugar sólo por ser homosexual. Doble es el malestar, por cuanto también se han quemado las expresiones de afecto y solidaridad, las flores o tarjetas que las personas dejan en ese lugar para recordar a Daniel”, señaló ese 20 de noviembre el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) al enterarse del supuesto ataque.

“Este grave atentado a la memoria de un joven que vivió lo más duro de la discriminación muestra que, a pesar de todo, a pesar de la ley antidiscriminación, la homofobia sigue existiendo. El Estado debe tomar un rol mucho más activo en educar a la población”, dijo el presidente la Fundación Iguales, Luis Larraín, ese día agregando que “como Fundación Iguales esperamos que la Justicia lo investigue para identificar y sancionar a quién o quiénes lo hayan hecho. Es gravísimo lo que sucedió”.

En tanto que la situación llegó también al Gobierno. Según su vocero, Marcelo Díaz, se trató de un hecho de “barbarie y discriminación que como sociedad debemos repudiar”. “Esperamos que la justicia dé a la brevedad con los responsables de este acto de intolerancia”, añadió el ministro.