Julio será el mes donde se registrará el peak de las enfermedades respiratorias en el país, producto del virus sincicial y la influenza. Esto, sumado a la contaminación ambiental, provocaría un colapso en el sistema de salud.

Por ello los gremios de la salud pidieron al Gobierno que asuma una postura más estricta sobre las preemergencias ambientales y sanitarias, y otorgue más recursos a los hospitales públicos a la prevención en los meses críticos de invierno.

El presidente de la Confederación Nacional de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam), Esteban Maturana, valoró las medidas hasta ahora tomadas por las autoridades, pero agregó que son insuficientes.

Entre las medidas presentadas por el representante de la Confusam se encuentran la fiscalización del uso de estufas a leña, controlar los procesos industriales y que los vehículos con prohibición de circular no estén en las calles.

Por su parte la presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los servicios de salud (Fenprus), Gabriela Farías, expresó que se debe tener un plan de acción, ya que esto se da todos los años.

Por su parte, el representante de los Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats), Oscar Riveros, comentó que las medidas adoptadas deben ser a largo plazo.

Además expresaron que los esfuerzos no sólo deben centrarse en la capital, porque existen otras ciudades con peores condiciones ambientales como Temuco y Puerto Montt.