El huracán Amanda, el primero de la temporada en el Pacífico y que llegó a alcanzar la categoría cuatro, siguió debilitándose el lunes hasta la categoría dos mientras se desplazaba lejos de la costa de México, donde sin embargo provocó fuertes lluvias, informó una fuente oficial.

El fenómeno meteorológico “se ha debilitado a huracán de categoría II en la Escala de Saffir-Simpson”, que cuenta en total con cinco grados de intensidad, informó la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en su informe de las 22H30 locales (03H30 GMT del martes).

Desplazándose a 7 km/h hacia el nor-noroeste sobre aguas cálidas del Océano Pacífico, con vientos máximos sostenidos de 165 km/h y rachas de hasta 205 km/h, Amanda “continúa lejos de las costas del Pacifico Mexicano, sin embargo, los desprendimientos nubosos de su amplia circulación alcanzan los estados” del oeste del país, precisó la misma fuente.

Así, se prevén lluvias muy fuertes (de 50 mm a 75 mm) en Jalisco y Michoacán, y fuertes precipitaciones (25 mm a 50 mm) en Colima, donde ya se han reportado algunos derrumbes en carreteras que no han dejado víctimas, según la prensa local.

Conagua ya había previsto que Amanda, tras alcanzar la categoría cuatro el domingo, se debilitaría a categoría dos para degradarse finalmente el viernes a depresión tropical a una distancia de 175 km de Isla Socorro, en Colima (noroeste), sin tocar suelo mexicano.

Por su parte, el gobierno de Honduras declaró este lunes “alerta verde” por 72 horas en el Golfo de Fonseca (Pacífico) debido a “un oleaje alto con rompimiento fuerte” provocado por el huracán.

Amanda es el primero de unos siete huracanes que se formarán en el Pacífico en la temporada de ciclones -que se extiende hasta finales de noviembre-, según cálculos del gobierno mexicano.

En 2013, México sufrió el azote simultáneo de los huracanes Ingrid (Golfo de México) y Manuel (Pacífico), que dejaron un saldo de 157 muertos y al menos 1,7 millones de damnificados.