Brasil ordenó la salida temporal de sus diplomáticos de Damasco, donde las tropas sirias combaten con los rebeldes por el control de varios barrios de la capital, informó la cancillería este viernes.

“El gobierno brasileño está monitoreando continuamente el deterioro de la situación de seguridad en Siria y decidió transferir temporalmente” a los diplomáticos de la embajada de Damasco a la de Beirut, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.

La decisión excluye por ahora el cierre de la legación diplomática, precisó el ministerio, que no informó sobre el número de funcionarios que dejaron territorio sirio. Un funcionario seguirá en la embajada en Damasco para prestar atención consular a los brasileños, precisó.

El canciller Antonio Patriota dijo más tarde el viernes que el personal llegó “bien” al Líbano.

Se estima que unos 3.000 brasileños estaban en Siria antes de que se agravara la revuelta contra el gobierno de Bashar al Asad, aunque según el canciller Antonio Patriota pocos quieren abandonar el país.

“La mayoría tiene pequeños negocios, construyó su vida en Siria y no tiene intención de partir. A los que pidan apoyo para partir, se lo daremos, pero ha sido un número relativamente pequeño”, dijo Patriota a la Agencia Brasil (estatal), sin precisar cuantos salieron.