La deuda del gobierno federal mexicano pasó del equivalente al 19,1% del Producto Interno Público (PIB) en 2000 al 27% el año pasado, señaló este lunes el diputado Jesús Cano, del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), secretario de la Comisión de Presupuesto de la cámara baja.

“La deuda del gobierno federal, entre 2000 y 2011, pasó de 19,1% del PIB en 2000 a 27% en 2011″, indicó Cano en base a datos proporcionados por el ministerio de Hacienda y Crédito Público.

Si se incluye la deuda de las empresas paraestatales, agregó, el porcentaje subió al finalizar el año pasado al 33,8% del PIB, correspondiente a 5,07 billones de pesos mexicanos (unos 412.600 millones de dólares).

No obstante, el legislador matizó que esta suma incluye la deuda de inversión de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), que pasó a considerarse pública a partir de 2009, por lo que no se puede hacer la comparación en términos porcentuales respecto a 2000, año en que el Partido Acción Nacional (PAN, derecha) le arrebató el poder al PRI tras siete décadas de hegemonía gubernamental.

Por otra parte, la deuda de estados y municipios ascendía al 31 de diciembre de 2011 a 390.777 millones de pesos (alrededor de 31.770 millones de dólares), correspondiente al 2,56% del PIB.

Cano subrayó que, pese a este crecimiento, “hoy por hoy la deuda federal y la de los estados y municipios está en niveles manejables” y que “en términos internacionales esta deuda no es alta” si se compara con la de países como Estados Unidos (donde equivale al 102% del PIB) o Brasil (59%), aunque subrayó que en otras naciones de la región, como Chile (9,4%) es bastante menor.

Sin embargo, advirtió que “la dependencia petrolera, la incapacidad de aumentar significativamente los ingresos tributarios, el aumento del gasto y la mala administración de los ingresos excedentes, ponen a México en una situación permanente de vulnerabilidad”.