Tres años y un día de presidio arriesga un joven que en febrero de este año portaba en la vía pública una bomba de ruido con ácido muriático y papel de aluminio, la que explotó en sus manos, ocasionándole diversas quemaduras.
El hecho ocurrió el 22 de febrero de 2011, cuando el acusado Nicolás Agustín Partarrieu Ramírez, de 18 años, permanecía al interior de su domicilio en el sector poniente de Temuco, donde confeccionó un artefacto explosivo, usando una botella con aluminio, ácido muriático y materiales altamente combustibles; apoyándose para ello de información recopilada en Internet.
Luego el joven salió a la calle donde dicho elemento explosivo detonó, ocasionando un fuerte ruido y provocándole lesiones leves en una de sus manos, descartando el fiscal Miguel Ángel Velásquez que el hecho correspondiera a un experimento para inflar un globo.
Los jueces del Tribunal Oral, tras oír los antecedentes del caso, resolvieron declarar culpable del hecho al joven acusado, quien ahora espera la audiencia programada para este viernes 30 de diciembre a las 12:30 horas.