Partidarios y opositores de una acción de la ONU contra Siria se enfrentaron en el Consejo de Seguridad este viernes, tras revelarse que la cifra de muertos de las manifestaciones contra el régimen habían sobrepasado los 3.000, dijeron diplomáticos.

Los países occidentales plantearon el tema de la represión mortífera del gobierno de Bashar al Asad contra los manifestantes durante las consultas regulares.

Pero Rusia y China bloquearon la semana pasada una resolución que planteaba posibles sanciones contra el gobierno.

“Los defensores de la inacción sobre Siria deberían sacar conclusiones de los últimos acontecimientos terribles”, dijo el embajador francés ante la ONU, Gerard Araud, en la reunión a puerta cerrada, según diplomáticos.

El jefe de Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, anunció más temprano en Ginebra que las víctimas mortales de siete meses de enfrentamientos en Siria habían sobrepasado las 3.000.