La Corte de Apelaciones de Chillán acogió la solicitud de extradición del miembro número 20 de la red de pedófilos de Chillán. Se trata de Luis Alejandro Gómez Irribarra, quien abandonó el país para irse a España en medio de la investigación por delitos sexuales que ya tiene 14 condenados y cinco nuevos imputados formalizados luego de que una serie de reportajes de la Unidad de Investigación de Bío Bío reactivara la causa.
De acuerdo con antecedentes recabados por BBCL Investiga, el prófugo es un chillanejo de 35 años que —según la indagatoria— violó en reiteradas oportunidades a Camila, la víctima principal de esta red que era liderada por su padrastro, Marco Antonio Orellana Basáes.
Documentos a los que accedió este medio dan cuenta que Luis —a quien la mayoría llamaba por su segundo nombre, Alejandro— aparece en diferentes videos de connotación sexual. Esas imágenes revelan que Camila tenía 14 años cuando la atacó sexualmente.
Y aunque Alejandro vivió durante un año tranquilamente en Málaga, un error lo llevó a que hoy esté detenido. Fue la Primera Sala del tribunal de alzada —integrada por los ministros Guillermo Arcos, Paulina Gallardo y el abogado Juan de la Hoz— quienes establecieron que cumplía todos los requisitos nacionales e internacionales para ser extraditado.
El número 20
El 24 de enero de 2024 Luis Alejandro Gómez salió de Chile. Para entonces, el caso llevaba dos años en investigación. Fue precisamente el 13 de septiembre de 2022 cuando la red de pedofilia se desbarató. La Policía de Investigaciones, en conjunto con la fiscalía, detuvieron a catorce involucrados, incluida la mamá de la víctima.
De ese total, cinco fueron a juicio oral y están actualmente en la cárcel. Los otros nueve obtuvieron penas que cumplen en libertad.
Gran parte de ellos fueron identificados en las 16.943 imágenes y 134 videos de pornografía infantil que almacenaba Marco Orellana, el teólogo y líder de la red. Pero también hubo otros hombres implicados que nunca pudieron ser identificados. Hasta hace poco.
Entre los cinco nuevos imputados que fueron detenidos en mayo de este año, se encuentra Wilfredo Torres Oyanedel, Cristian Inostroza Curinao, Jaime Hernández Córdova, Luis Quezada Penroz y Daniel Fuentes Yáñez. Este último, según reveló un reportaje de BioBio Investiga, catalogado como “el brazo derecho de la red”.
El sexto sujeto era precisamente Luis Alejandro. El problema es que estaba fuera del país.
Con él en la lista, se acumulaba un total de 20 involucrados en la red de pederastia de Chillán.
Declárese rebelde
El día que detuvieron a los últimos cinco imputados, la PDI realizó diligencias para acercarse al paradero de Alejandro.
Según los documentos a los que accedió este medio, el 18 de junio de este año La Brigada de Delitos Sexuales de Chillán revisó en el sistema de gestión policial para comprobar su salida de Chile. El motivo para aterrizar en la ciudad española, según estipuló Alejandro, era “visita única de viajes”.
Por lo mismo, solicitaron al Departamento de Asuntos Internacionales algún movimiento nuevo respecto a su paradero. El agregado policial en la Embajada de Chile en Madrid remitió los antecedentes a la Sección de Localización de Fugitivos de la Unidad Central de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO), dependiente de la Policía Nacional de España. Pero nada de eso sirvió. Alejandro estaba inubicable.
El 30 de agosto, a las 01:05 minutos, volvieron a revisar el sistema. Lo único que aparecía era que mantenía una orden vigente por el delito de violación de mayor de 14 años. De su paradero, nada.
Con estos nulos movimientos, el 29 de septiembre de 2025, el Tribunal de Garantía de Chillán despachó una orden judicial que dice lo siguiente:
“DECLÁRASE REBELDE al ya aludido encartado y, por consiguiente, SE SOBRESEE TEMPORALMENTE la presente causa a su respecto”.
Notificación azul
Su estado de prófugo le duró menos de un mes. En noviembre, Alejandro tuvo un “conflicto doméstico” en Málaga. Esa, fue su propia condena.
El jefe del Departamento de Asesoría Jurídica de la Fiscalía Regional de Chillán, Francisco Soto Donoso, detalló que “el imputado tuvo la mala idea de tener un conflicto con una vecina en la localidad de Benalmádena (…) y al tener este conflicto seguramente llegó la policía, ingresaron sus datos al sistema y se encontraron con que estaba con notificación azul”.
La notificación azul de la Interpol es para conseguir información —paradero o actividades delictivas— sobre una persona que está siendo investigada penalmente.
En base a esos antecedentes, la Oficina Central Nacional (OCN) de Madrid encendió las alertas y se comunicó con la policía chilena mediante un informe fechado el 5 de diciembre.
En respuesta, el Ministerio Público solicitó al Juzgado de Garantía una audiencia para formalizar en ausencia al imputado, instancia que se materializó el miércoles 9 de diciembre recién pasado. En la oportunidad, el órgano persecutor informó al tribunal que están investigando a Alejandro por los delitos de violación reiterada de menor de 14 años, violación reiterada de mayor de 14 años y producción de material pornográfico infantil.
Extradicción
La fiscalía pidió elevar los antecedentes al tribunal de alzada chillanejo con el propósito de iniciar el proceso de extradición activa del sujeto desde España y solicitar su detención.
Este viernes, la Corte de Apelaciones declaró pertinente solicitar a España la detención y extradición de Luis Alejandro Gómez.
“Que, con relación a los delitos atribuidos a Gómez Irribarra, estos se encuentran penados ante el Estado respecto del cual se solicita la extradición activa”, plantea el fallo firmado por los dos ministros y un abogado.
Además, el delito no se encuentra prescrito, ya que fueron cometidos entre el 01 de febrero de 2017 y el 18 de diciembre de 2018.
Fuentes cercanas al caso explican que ahora la Corte debe confeccionar un cuaderno de extradición que debe contener la copia de la carpeta de investigación. Cuando eso esté listo, lo deben enviar a la Dirección Jurídica del Ministerio de Relaciones Exteriores. Si España lo aprueba, Alejandro regresaría a Chile para ser formalizado. Los tiempos de espera dependen de cada embajada.
Ante consultas de este medio, desde la Fiscalía Regional de Chillán señalaron que no se pueden referir a la investigación.