Un estudio catastral realizado conjuntamente entre los ministerios de Agricultura y Energía, permitió identificar 290 oportunidades para instalar centrales asociadas al riego, cuya potencia total alcanzaría a más de 860 MW, entre las regiones de Atacama y La Araucanía.

La investigación “Evaluación técnica preliminar de centrales hidroeléctricas asociadas a obras de riego”, está determinada hacia proyectos preferentemente con potencias individuales superiores a 2 MW. El desarrollo de este trabajo está en el marco del Programa de innovación y competitividad de la Unión Europea – Chile, y marcha en la línea de crear modelos de negocios que van en esa dirección.

Según el titular de Agricultura, José Antonio Galilea, esta iniciativa demuestra la vialidad del proyecto, además de un acercamiento entre los regantes y la industria hidroeléctrica.

“Es aquí cuando las pequeñas centrales hidroeléctricas se presentan como una alternativa para aprovechar la energía hidráulica de canales de riego y cursos de agua naturales para producir electricidad”, puntualizó la autoridad.

Respecto de las ventajas económicas y sociales de este tipo de proyectos, Galilea destacó que los agricultores podrán eventualmente vender energía y reducir los costos de producción de los cultivos. Además, las pequeñas centrales tienen la capacidad de ofrecer energía con costos competitivos que permiten rentabilizar la inversión.

Asimismo, en este negocio se utilizarán los derechos de agua de los agricultores, que junto con ser aplicados a la generación, se consumirán para el riego, lo que para el secretario de Estado significará una “revolución gigantesca”.

Finalmente, Galilea anunció que durante el 2011 el Gobierno extenderá y ampliará el estudio incorporando a las regiones de Valparaíso y O’Higgins. En tanto, la Comisión Nacional de Riego (CNR), está en proceso de elaborar un convenio con la Asociación de Pequeñas y Medianas Centrales Hidroeléctricas (Asemec), para lograr la implementación de los proyectos que ya fueron estudiados.