Presentaron en Valdivia, una querella por torturas y apremios ilegítimos en contra de funcionarios de la Policía de Investigaciones, acción que también busca ampliarse contra un Fiscal.

Los hechos se remontan al mes de agosto del año 2009, cuando 8 funcionarios de la PDI llegaron hasta el domicilio de Alberto Haristoy González con una orden de detención y allanamiento en contra de éste último, por una causa pendiente a raíz de daños a un vehículo.

Según lo narrado por el mismo Alberto Haristoy, en la oportunidad se produjo un forcejeo entre los policías y su mujer, que terminó con una funcionaria lesionada, hecho que originó posteriormente la detención del dueño de casa, quien fue trasladado hasta el cuartel de la PDI donde fue agregido físicamente en venganza de lo ocurrido.

El afectado, aseguró que desde ese momento se generaron una serie de irregularidades en su causa, que van desde el extravió del certificado donde se constató lesiones, hasta la apertura de un proceso investigativo que ha tardado más de lo habitual, hecho que motivó la presentación de esta querella buscando justicia.

Haristoy González acusó que en la injusticia no existe igualdad en los casos porque si bien él fue acusado por los delitos de lesiones en contra de la funcionaria, su caso no ha tenido respuesta en todo este tiempo, advirtiendo que por ello buscan ampliar la querella hacia un fiscal por encubrimiento.

En tanto la Policía de Investigaciones de Valdivia, confirmó que efectivamente ese día hubo una refriega entre esta persona y los
funcionarios a raíz de la detención, pero que se ajusta a derecho.