Como un estado de extraordinario riesgo definió el ministro de Salud, Jaime Mañalich, la condición sanitaria de los comuneros mapuche que permanecen en huelga de hambre en penales de las regiones del Bío-Bío y La Araucanía, además de centros asistenciales.
Jaime Mañalich
Lejos de integrarse a las actividades conmemorativas del Bicentenario, el secretario de Estado, mandatado expresamente por el Presidente de la República, llegó hace pocas horas a Temuco para reunirse con el equipo del ministerio a su cargo en la zona.
De este modo, el fin es analizar los planes de contingencia activados para atender a los 35 comuneros que protagonizan la huelga de hambre, permaneciendo actualmente dos de ellos en el Hospital de Victoria y otros dos en el Hospital Intercultural de Imperial.
Mañalich precisó que la preocupación en este momento deriva de lo prolongado de la huelga que mantienen los comuneros, con la debilitación que ello conlleva y que los hace altamente vulnerables a cualquier enfermedad, especialmente complicaciones infecciosas.
El secretario de Estado aclaró además que no se está alimentando a los huelguistas, ni tampoco está la intención de hacerlo, respetando un compromiso con ellos asumido y destacando que se ha logrado establecer un sistema de visitas médicas a todos los comuneros, incluidos -dijo- los tres que recuperaron recientemente la libertad.
El ministro de Salud, tras ofrecer en Temuco una rueda de prensa en horas de anoche, se trasladó junto a la secretaria ministerial del ramo y la directora del Servicio de Salud Araucanía Sur hasta el Hospital Intercultural de Imperial, para verificar la condición de los comuneros Andrés Gutiérrez Coña y el joven de 18 años Luis Marileo, quienes llegaron descompensados desde la cárcel de Valdivia y del Centro de Privación de Libertad de Chol Chol respectivamente.
En horas de esta mañana el ministro de Salud viajó a Victoria, donde visitó a los comuneros Felipe Huenchullán y Fernando Millacheo, internados en el hospital de la comuna.
