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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Un brutal crimen conmociona al barrio Vélez Sarsfield, en Resistencia, Argentina, donde un hombre de 27 años asesinó a su padre, de 65, y escondió el cuerpo en un congelador. Tras días sin noticias, el hijo mayor denunció la desaparición, desencadenando una intensa búsqueda que culminó con el macabro hallazgo, que fue condesado por su hijo de 27 años. La autopsia reveló que el padre murió estrangulado, presuntamente por negarse a darle dinero a su hijo para comprar drogas.

Un brutal crimen conmocionó al barrio Vélez Sarsfield, en la ciudad chaqueña de Resistencia, en Argentina, luego de conocerse que un hombre de 27 años asesinó a su padre y ocultó su cuerpo en un congelador.

Pasaron algunos días y nadie lograba comunicarse con Rogelio Gauna, un carpintero de 65 años que convivía con su hijo Marcos. Hasta ese entonces, las últimas noticias que se tenían del hombre fue el día que cobró su jubilación, consigna El Perfil.

Tras no dar con su paradero, Fernando, el hijo mayor de Rogelio, realizó una denuncia y desde allí comenzó una intensa búsqueda de policías.

Hombre fue encontrado muerto en un congelador

El primer sospechoso fue Marcos. Un factor que despertó la sospecha de los agentes fue que el hombre de 27 años ofrecía distintas hipótesis sobre lo que le podría haber sucedido a su padre a amigos y allegados que le consultaban por él.

Además, se mostraba nervioso, y los vecinos habían reportado que desde su casa emanaba un olor nauseabundo, señala el sitio.

“Mi hermano me dijo que mi padre había viajado al interior a hacer unos trabajos. Y bueno, le creí esos dos días. Fui yo el que denunció cuando vino un amigo de mi papá y me cuenta que supuestamente estaba en otro lugar”, declaró Fernando al noticiero local N9.

En ese sentido, agregó: “Las sospechas comenzaron el jueves por la mañana. Ya el domingo se sentía un olor feo, no se podía estar. Ese olor había sido que había una heladera en desuso”.

Con aquellos detalles, la Policía de Chaco ingresó a la casa y encontró el cuerpo de Rogelio dentro del congelador, siendo su principal sospechoso su hijo Marcos.

Detalles de la autopsia

La autopsia determinó que la muerte del hombre ocurrió entre cinco y seis días antes de que su cadáver fuera hallado por los efectivos y no se detectaron marcas de sogas, cinturones u otros objetos, por lo que se estipulaba que había muerto por una tercera persona: Marcos, quien confesó poco después que asesinó a su padre.

De acuerdo a la policía, se sospecha que cuando la víctima regresó con el dinero, el presunto asesino se lo habría pedido para comprar droga, pero su padre se negó.

A raíz de ello se desató una fuerte discusión y el sospechoso terminó estrangulándolo.

Además, según información revelada por el medio, Marcos solía pedirle dinero a Rogelio para comprar drogas, e incluso, había vendido algunos objetos de valor para conseguirla.

Problema con las drogas del hijo

Hasta el momento la investigación continúa y se ordenó la detención de Marcos Gauna, en el marco de un presunto caso de parricidio que deberá ser indagado.

“Mi hermano estaba incontrolable”, dijo Fernando, quien afirmó que su hermano ya había estado internado por su adicción a la cocaína y que actualmente estaba viviendo en el domicilio en el que se encontró el cuerpo.

“Mi hermano sí consumía cocaína, dos veces estuvo internado. Perdió su familia, robaba, estaba incontrolable”, señaló el hombre. Por otro lado, comentó que a su madre también le había pedido dinero para comprar estupefacientes, pero ella se negó rotundamente.

Por último, expresó que Marcos había intentado recuperarse de su adicción. “Él pidió ayuda, se lo ayudó, salió bien. A poco tiempo volvió a caer, pero ya era por cosa de él. No tenía voluntad propia para salir de eso”, lamentó.