Contraloría dictaminó que la Municipalidad de Ñuñoa no tiene las facultades para decretar “Estado de Emergencia” en la comuna.
La medida fue anunciada por el alcalde Sebastián Sichel (independiente por Chile Vamos) en marzo pasado, luego que un carabinero resultara baleado al intentar frustrar un robo de un vehículo.
“He tomado la decisión de decretar Estado de Emergencia Comunal. Nos permitirá tomar medidas inmediatas para prevenir y reforzar la Seguridad en Ñuñoa”, escribió en X.
La decisión fue llevada al ente contralor por la concejala Maite Descouvieres (PS), más Vicente Abarca Hidalgo y José Olivos Jorquera, entre otros. Ellos pidieron a Contraloría que se refiriera a la legalidad de dicha medida.
No tiene competencia
En un dictamen firmado por la contralora Dorothy Pérez, se informó que las municipalidades no tienen competencia para declarar estados de emergencia, ya que esa facultad corresponde al Presidente de la República en casos de grave alteración del orden público. Aquello se consigna en el artículo 42 de la Constitución.
Además, se estableció que la declaración de emergencia requiere una formalización por parte de las autoridades constitucionalmente habilitadas y no puede ser asumida por los municipios.
En el dictamen, se dice que en la normativa municipal “no se advierte la existencia de una potestad que habilite a las entidades edilicias a declarar estados de emergencia o similares, por lo que, de conformidad con el mencionado principio de juridicidad, los municipios no tienen competencia para efectuar tales declaraciones”.
“En todo caso y en lo sucesivo, la Municipalidad de Ñuñoa deberá abstenerse de efectuar declaraciones en términos que induzcan a desvirtuar la naturaleza jurídica de los actos administrativos como los cuestionados, sin perjuicio de las competencias que los municipios tienen a su disposición en materia de seguridad pública”, escribió Pérez.
Declaración de la municipalidad
Pese a lo mencionado anteriormente, el dictamen también consigna que “conforme lo informado por el municipio, se aprecia que lo decretado dice relación con la adopción de medidas de gestión interna con la finalidad de prevenir los delitos y promover la seguridad pública dentro de su territorio, lo que se adecúa a la referida función municipal sobre la materia”.
Esto fue tomado por la Municipalidad como una ratificación de que sí pueden decretar la medida. “Respecto a lo emitido por Contraloría, la municipalidad actuó conforme a lo dispuesto por el organismo fiscalizador”, señalaron en un comunicado.
“Esta gestión tiene como una prioridad el orden y la seguridad de la comuna. Sabemos que es una preocupación de los vecinos, y por lo mismo, estamos haciendo todo lo posible para recuperar el buen vivir en Ñuñoa”, agregó la casa edilicia.
Uso de redes sociales
Junto con ello, Contraloría también abordó una denuncia realizada de forma anónima. En ella se acusó que Sichel estaba utilizando su cuenta personal de redes sociales para realizar anuncios referidos a su labor como alcalde, lo que luego era replicado por el municipio.
A juicio de Contraloría, son las cuentas oficiales de la municipalidad las que deben realizar dichos anuncios y que hacerlo por la vía del alcalde contraviene normas sobre probidad y uso adecuado de bienes públicos.
Además, se hizo hincapié en que no se permite que sean las autoridades las que difundan información en sus cuentas privadas, sin que exista una autorización formal.
Por esto, se solicitó al municipio que tome medidas para evitar publicaciones que infrinjan las normativas y aclarar la naturaleza jurídica de sus actos administrativos.
“La Municipalidad de Ñuñoa deberá arbitrar todas las medidas necesarias a objeto de evitar realizar publicaciones que infrinjan las ya citadas preceptivas jurisprudenciales, ya que es la entidad edilicia, como institución, quien presta los servicios que se anuncian en cumplimiento de sus funciones, y no las autoridades en forma independiente, como eventualmente pudiera entenderse de las referidas actuaciones denunciadas”, se dijo en el dictamen.