El atropello de Ruo Yuan Lee Tsai, la niña de siete años que resultó gravemente herida tras ser arrollada por un furgón escolar, cambió la vida de su padre, Johnny Lee.
El hombre de origen taiwanés y que llegó hace 17 años a Chile desde Paraguay ha dejado de lado sus negocios y eventuales trabajos de traductor y pasa sus días en la Clínica Alemana, donde se encuentra sedada su hija, consigna La Cuarta.
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Lee reconoce que “en estos momentos solo pienso en mi hija, la justicia vendrá después. Lo único que pienso es que uno debe hacerse cargo de sus actos, como es el caso de la conductora”.
En cuanto al estado de salud de Ruo, el padre de la niña indicó que “en estos momentos se encuentra sedada y los médicos están esperando que evolucione para quitarle gradualmente su sedación. Tiene varias fracturas, pero lo que más importa en estos momentos es su cabecita y que no termine con secuelas a futuro”.
Además comenta que “tuve que dejar de lado un poco el trabajo. Los apoderados del colegio de Ruo estaban juntando plata pero tuvieron problemas y no pudieron seguir”.
Este jueves, en la duodécima sala de la Corte de Apelaciones resolvió decretar prisión preventiva para la conductora del furgón escolar, María Eugenia Viteri, quien previamente había quedado libre tras haber estado prófuga.
Recordemos que el accidente se produjo el pasado 19 de junio, cuando la niña junto a su madre y su hermano iba al colegio, instancia en que fue arrollada por el furgón, en la comuna de Ñuñoa.
Al día siguiente la conductora del vehículo fue detenida y posteriormente formalizada por los delitos de lesiones graves, gravísimas y además por darse a la fuga sin prestar auxilio.
