"Lamentamos profundamente estos actos de violencia". De esa manera, el Arzobispado de Concepción rechazó la quema de una iglesia católica y un templo evangélico ocurrido la madrugada de este martes durante un ataque incendiario en la provincia de Arauco.

El Arzobispado de Concepción, rechazó el ataque incendiario ocurrido la madrugada de este martes en la provincia de Arauco, el cual dejó como saldo una iglesia católica y un templo evangélico destruidos por las llamas.

Por medio de un comunicado, se apuntó que los hechos ocurrido además de “inconducentes, no aportan en nada a la solución de los graves problemas políticos, sociales y económicos que aquejan al país y a la zona de Arauco”.

Asimismo, se añade en la misiva que “solo a través del diálogo se podrán lograr soluciones justas y adecuadas a las dolorosas situaciones humanas de toda índole aún presentes en esa zona del país”.

“Reprobamos estos hechos y lamentamos el daño que se realiza a quienes profesan la fe, que además, hiere un aspecto fundamental del ser humano, la libertad religiosa“, se apunta además en el texto.

En esa línea, expresaron que existe una necesidad de atender “adecuadamente a la población de Arauco quienes, por muchos años, han estado rezagados y no han visto en la práctica un real interés por parte de toda la sociedad chilena frente a su situación de pobreza, marginación y desamparo”.

Por su parte, el representante regional de iglesias evangélicas en el Bío Bío, Héctor Luengo, no dudó en calificar estos hechos como terroristas, mostrándose además preocupado por la impunidad en que -a su parecer- actúan estos grupos y también por la falta de seguridad de las comunidades cristianas.

“A nosotros nos parece muy mal lo desprotegidos que nos encontramos como zona de Arauco (…) Seguimos a expensas del terrorismo”, afirmó Luego.

La primera de las emergencias ocurrió en el sector Bajo Quilantahue en Tirúa, donde se verificó el incendio del templo “Nuevo Pacto Pentecostal Cristiano”, punto donde el pastor de esta comunidad confirmó la destrucción completa de este inmueble por las llamas.

Más tarde en el sector Primer Agua de la ruta P-72S, testigos informaron de un incendio en una iglesia católica, la que también terminó destruida por la acción del fuego.

En ambos hechos no se registraron personas lesionadas o heridas, sin encontrarse tampoco la presencia de panfletos alusivos a alguna causa determinada.