Tras cinco meses desde que el fallo quedó en acuerdo, los damnificados de las inundaciones del sector Collao -ocurridas hace más de 10 años- tendrán que seguir esperando debido a que la Corte Suprema anuló la vista de la causa, luego que la magistrada Rosa Egnem se percatara que entre las demandantes estaba su hermana.
Dicho antecedente obligó a invocar su inhabilidad, no obstante, la Tercera Sala de la Corte Suprema había escuchado los alegatos en julio del año pasado, dejando en acuerdo el fallo en octubre pasado por lo que el máximo tribunal del país decidió anular la vista de la causa.
Para el abogado Adolfo Ortega, se trata de un revés que puede pasar, considerando los 7 mil demandantes en el caso.
La tranquilidad del abogado está muy lejos de la molestia expresada por Patricio Toledo, vocero de los inundados por las torrenciales lluvias de hace 10 años, y quienes esperan impacientes que el Estado los indemnice.
Con la decisión de la Suprema, el recurso del Consejo de Defensa del Estado será revisado nuevamente, según explicó el abogado Ortega.
Los afectados indicaron que no aceptarán que la Corte Suprema fije la indemnización en menos de 15 millones de pesos para cada uno, como reparación por los daños que dejó la negligencia del MOP al no haber efectuado las obras que podrían haber impedido el desborde del río Andalién y el estero Nonguén.