Dos concejales de Viña del Mar acusaron a la municipalidad y a la alcaldesa Virginia Reginato de esconder un documento clave, entregado a Contraloría, que confirmaría las irregularidades al interior de la casa edilicia.
Se trata del oficio reservado número 38, del 19 de octubre del año pasado, que fue firmado por la alcaldesa y dirigido al contralor regional en medio de la auditoría que se seguía realizando.
Los concejales Laura Gianicci y Sandro Puebla plantearon que en una sesión del Concejo Municipal, el 24 de enero pasado, varios ediles, incluyendo los que militan en la Unión Demócrata Independiente (UDI) y Renovación Nacional (RN), pidieron que se entregara el documento, sin embargo, desde la alcaldía contestaron que por ser de carácter reservado no puede divulgarse su contenido.
Gianicci, de la Democracia Cristiana (DC), aseveró que insistirán en la próxima reunión del Concejo. La concejal también apuntó que la solicitud ante el Tribunal Electoral Regional (TER), al que piden la remoción de Reginato por notable abandono de deberes, se basa en el reconocimiento del propio municipio de los problemas de gestión.
El concejal independiente Sandro Puebla pidió a la alcaldía ser transparente y cuestionó que este tipo de documentos sean de carácter reservado.
Esta acusación se da en medio de la polémica por el método que usó Contraloría para calcular el déficit de 17 mil millones pesos en la Municipalidad de Viña del Mar. De acuerdo a Andrés Silva, abogado de los cuatro concejales que solicitaron la destitución, esa deuda no está en el corazón de la presentación ante el TER.
