La Contraloría tomo razón del plan de prevención y descontaminación atmosférica para las comunas de Concón, Quintero y Puchuncaví, tras los graves episodios de contaminación durante 2018 en la región de Valparaíso.

El plan, cuyo costo total supera los US$110 millones, comenzara a regir desde el lunes 1 de abril.

La medida pretende incorporar medidas de control de emisiones para material particulado y gases precursores que permitan cumplir las metas de calidad del aire establecidas.

Para esto, se plantea disminuir las concentraciones de contaminantes existentes en un plazo de 5 años, con limites para el dióxido de azufre, óxido nitrógeno y material particulado: principales compuestos emanadas por las tres grandes fuentes contaminantes, como AesGener, Codelco División Ventanas y ENAP.

En conjunto, dichas empresas generan el 76% de las emisiones de material particulado, el 99% de las emisiones de dióxido de azufre y el 81% de las emisiones de óxido nitrógeno.

Por su parte, se aplicarán los mismos límites para los hidrocarburos y las emisiones de compuestos orgánicos volátiles.

Al respecto, el subsecretario de Medio Ambiente, Felipe Riesco, sostuvo que el 1 de abril comienza a regir lo dispuesto.

Codelco, AesGener y ENAP, junto a las otras empresas del cordón industrial, no deberán sobrepasar las emisiones máximas permitidas.

A contar de la publicación, habría una reducción inmediata, proyectada a reducir aún más las emisiones en un plazo de tres años. Ello, con una serie de especificaciones técnicas para cada proceso industrial, como calderas, chimeneas y descargas de combustibles.

El senador Francisco Chahuán valoró la aprobación, pero aseguró que ahora el Gobierno debe sumar al plan nuevas normas con un estándar basado en la Organización Mundial de la Salud (OMS) para evitar nuevos episodios.

El plan tiene un horizonte de evaluación de 12 años. El costo se traduce en US$20,9 millones para la aplicación de las medidas y US$91,9 millones por concepto de implementación.

Así, busca disminuir los casos de mortalidad, a través de la reducción de ozono troposférico, que mejoraría la calidad del aire, reduciendo efectos asociados a la exposición de compuestos orgánicos volátiles. Esto permitiría disminuir los ataques de asma, admisiones hospitalarias, las visitas a salas de emergencias y las muertes prematuras.

Andrés León, activista medioambiental y vocero de la Agrupación Dunas de Ritoque, catalogó como un logro la aprobación del plan y espera que pueda descontaminar el aire en la zona.

El plan además exige a la Seremi de Medio Ambiente (SMA) mantener un registro actualizado de las fuentes estacionarias de la zona. La Seremi de Salud tendrá un plazo de 3 meses para entregar a su par medioambiental la información histórica de las fuentes registradas.

Ante eventuales episodios críticos, constatados por el monitoreo o por un aumento de atenciones en Urgencias, el Gobierno Regional deberá exigir a las empresas aplicar sus planes operacionales y detener las faenas.

Para esto, la SMA dictará en un plazo de 30 días una resolución con los criterios para determinar las condiciones de ventilación.

Finalmente, el Gobierno dispondrá de dos fiscalizadores con dedicación exclusiva para velar por el cumplimiento del plan. Asimismo, deberá entregar cada 31 de marzo, un informe de calidad del aire.