Durante este viernes el Congreso Nacional cancelará a la Municipalidad de Valparaíso alrededor de 200 millones de pesos, la última parte del total de la deuda que esta corporación tenía con la comuna por no legalizar las obras de ampliación y remodelación al interior de la sede legislativa desde 1993.

Era una deuda total cercana a los 300 millones de pesos. Las arcas municipales porteñas recibirán la segunda cuota de ese pago, equivalente a casi dos tercios del total, zanjando así una historia que se arrastraba desde hace casi 25 años.

El trabajo para aclarar la situación que se extendió durante varios meses y se tuvo que revisar con detención el plano original del edificio del Congreso Nacional y cada una de sus modificaciones desde esa fecha.

La gran mayoría de estas últimas no estaban regularizadas ya que los permisos de la Dirección de Obras Municipales simplemente no se habían tramitado.

Así lo detallo Miguel Landeros, secretario general de la Cámara de Diputados, quien incluso reconoció el error en que el Fisco, que a través del Ministerio de Obras Públicas se hacía cargo del inmueble, incurrió al no normalizar los trabajos.

Pero los pagos desde la corporación a la municipalidad no quedarán ahí, porque tambien se contempló un protocolo de acción para cancelar alrededor de 1.200 millones de pesos.

Esto se debe a la utilzación de un antiguo pasaje público ubicado a un costado de la iglesia Doce Apóstoles, que finalmente desapareció tras la construcción del edificio del legislativo.

Landeros aseguró que la voluntad tanto del Congreso como del municipio es poder lograr una compensación para la ciudad tras el uso de esa desparecida vía que era un bien de uso publico.

Por ello, con los recursos se buscaría mejorar los sectores públicos ubicados en los sectores aledaños al recinto.

Para que las obras se materialicen deben quedar zanjadas de cara a la discusión de la Ley de Presupuesto 2019 en el segundo semestre de este año.