El Juzgado de Garantía de Graneros resolvió mantener la prisión preventiva en que se mantiene hace cerca de un mes y medio Marcelo Hernández, gerente de Línea Azul.
El empresario se encuentra imputado por la muerte de seis personas y las lesiones a 46 pasajeros, tras el volcamiento de un bus en la región de O’Higgins, cerca del casino Monticello en la Ruta 5, durante la madrugada del 29 de julio.
Por dos horas se extendió la audiencia de revisión de medidas cautelares, tras la cual su defensa anunció que buscarán la libertad de su cliente en la Corte de Apelaciones de Rancagua.
“Soy contador auditor, no mecánico”
Según la investigación de la Fiscalía, él habría estado en conocimiento de los problemas mecánicos que tenía el vehículo de transporte de pasajeros, que causó el accidente. Eso y el hecho de que la patente no correspondiera al bus, junto con otras irregularidades que presentaba la máquina.
Durante la audiencia, Hernández se defendió, sosteniendo “yo tengo entendido que la máquina estaba en perfectas condiciones”, y que “nunca he dado la orden de que se cambie una patente”.
En este sentido, argumentó que es “contador auditor, no soy mecánico”.
También aseguró no tener poder de decisión sobre algunas cosas que se le imputan: “Yo no tengo injerencia en la empresa sobre los buses que circulan”, asegurando que sólo supervisa “algunas cosas”.
Por ello, responsabilizó al conductor del siniestrado bus, y negó haber borrado mensajes de su celular relacionados con el hecho.
“El imputado faltó a la verdad”
A juicio de uno de los querellantes que representa a algunos familiares de las víctimas, el abogado Alfredo Morgado, el empresario “faltó a la verdad absolutamente, vino a mentir al tribunal”.
“El ejercía defacto como gerente el control absoluto de la empresa, sobre todo en labores de taller, de mantenimiento, de compra de repuestos”, aseguró.
El fiscal jefe de Graneros, Pablo Muñoz, aseguró que lo indicado por el imputado es totalmente distinto a los antecedentes que tienen en la carpeta investigativa.
Argumentos insuficientes para modificar la cautelar
Luego de su declaración, los intervinientes comenzaron a discutir la solicitud de cambio de medida cautelar del gerente, ya que su defensa pidió que se modificara a una menos gravosa. Sin embargo, el juez Rubén Donoso decidió mantenerlo en prisión preventiva.
El defensor del empresario, Juan Carlos Manríquez, criticó las imputaciones de la Fiscalía y junto con insistir en que su cliente no tiene responsabilidad en el fatal accidente, anunció que recurrirá a la Corte de Apelaciones de Rancagua y a la Corte Suprema.
Previamente, el conductor del bus obtuvo un cambio en su medida cautelar, pasando de arresto domiciliario total a nocturno. Mientras tanto, el jefe del taller mecánico de la empresa, permanece con arresto domiciliario total.
