Lo que nació de forma ingenua en una conversación entre dos hermanos se transformó en mucho más de lo que alguna vez llegaron a imaginar.

El Museo de Historia Natural Río Seco, ubicado en la comuna del mismo nombre, en la región de Magallanes, es una floreciente instancia educativa, científica e investigativa, abierta a todo público y de forma gratuita.

El magíster en Artes Visuales de la Universidad de Chile y cofundador del museo, Miguel Cáceres, detalló a BioBioChile que la idea surgió en 2013, cuando él terminaba su postgrado en la casa de Bello y su hermano Benjamín su pregrado en Biología Marina en la Universidad Austral (UACH).

Sin embargo, la idea original era “hacer una muestra nada más”, una de corte museográfico en la cual se pudieran mezclar las ciencias y las artes.

Y ese es el foco del museo, ser “un laboratorio y taller de trabajo” en el cual se lleven a cabo procesos de preparación y montaje de muestras biológicas para su estudio y posterior exhibición, de las cuales ya cuentan con más de 200 ejemplares, afirmó Cáceres.

Para lograr aquello, en 2013 ambos decidieron irse a vivir la comuna y trabajar en el proyecto de forma presencial y con dedicación casi completa.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Primeros años

Benjamín volvió de Valdivia, ciudad donde trabajó durante 2012 con el profesor a cargo de armar muestras para la UACH, Pedro Agurto, con quien aprendió manejo de colecciones biológicas y osteotécnia: técnicas en recuperación de esqueletos.

Para ayudarlos, su padre les ofreció una sala en las dependencias de la empresa Algina S.A., para la cual trabaja, compañía que funciona en las antiguas instalaciones del exFrigorífico Río Seco.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Los primeros trabajos que mostraron fueron 5 cráneos y una serie de “bichos”, dijo Cáceres, pero la sala empezó a quedar pequeña al poco tiempo.

Las colecciones empezaron a crecer más de lo que imaginamos. Empezamos a llenar rápidamente esta pequeña salita y fuimos descubriendo este lugar, encontrándolo alucinante y desde ahí que somos ‘okupas"”, precisó.

En el primer periodo de funcionamiento, todo era financiado por ellos, especialmente con el trabajo de Miguel como profesor del Colegio Británico y el de Benjamín, como biólogo independiente.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Momento clave

Un momento clave en la ampliación del trabajo del museo fue cuando los Cáceres presentaron su iniciativa a Gabriela Garrido, actual encargada de Logística y Gestión de Recursos del museo, quien decidió sacar personalidad jurídica a modo de postular a proyectos.

Tras ello crearon la Asociación de Investigadores del museo, la cual preside el biólogo marino de la Universidad de Concepción, gerente de Algina S.A. y padre de los cofundadores, Patricio Cáceres, entre otros profesionales.

¿Cómo han llegado las colecciones?

Los animales que adornan el museo han llegado con expediciones a lugares cercanos, playas y bosques, tanto propias como con la ayuda de amigos.

En éstas son importantes los lugares emblemáticos de varamientos de cetáceos, como lo son Bahía Inútil y Bahía Lomas, en Tierra del Fuego.

En ésta última, además de poder encontrar especímenes para su posterior conservación, los científicos del museo -en coordinación con el Centro Bahía Lomas y la ayuda de Gabriela Garrido- han podido realizar censos de aves migratorias desde el Ártico canadiense en busca de comida en la Patagonia chilena.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Es por ello que, en palabras de Cáceres, el lugar es “un hueserío”, lo que facilita -de cierta forma- los trabajos de búsqueda de restos óseos de animales, tanto de aves como de cetáceos.

Además, cuentan con ayuda de Sernapesca y del Servicio Agrícola y Ganadero, quienes -de vez en cuando- les remiten animales fallecidos para su conservación.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Pese a que el principal trabajo del museo tiene que ver con la restauración de vertebrados, también cuenta con una colección botánica y de hongos representativos de la región.

Financiamiento y necesidades

Dentro de los proyectos que se han adjudicado destacan tres: dos del Consejo Regional y uno del Consejo del Libro. Con el último lograron construir e implementar una biblioteca en las dependencias que usan.

Cáceres indicó que, por el momento, tal vez la necesidad más importante es el contar con la logística necesaria para poder trabajar con varamientos de animales de gran escala, como es el caso de ballenas.

“Mover un animal de 40 toneladas es muy complejo. Nosotros llegamos con cuchillos y con la ropa que cada uno ha podido comprar”, sostuvo.

“La realidad es que volvemos a trabajar y el mar se llevó los restos. Ahí faltan mayores recursos para el museo, pero también una mayor comprensión de lo que significan estos eventos y las posibilidades gigantes de poder recuperar un esqueleto de 15 metros para su posterior exhibición y con toda la plusvalía que tendría para la región”, añadió.

No obstante, Cáceres dice que de momento mayores necesidades no tienen. Algina S.A. no les cobra por usar el lugar y la empresa Magelan, que extrae gel de algas en la zona, les brinda insumos como agua oxigenada para el blanqueo de los huesos.

Vinculación con el medio

El Museo de Historia Natural Rio Seco cuenta desde 2014 con un programa de vinculación con el que han podido trabajar con escolares y el que se ha robustecido con aportes de la Fundación Mar Adentro.

En un principio partieron trabajando y colaborando con un par de horas con el Programa Explora en compañía de la profesora Madany Muñoz, cuyos estudiantes siguen atendiendo a clases de ciencia los jueves por la tarde.

Si colegios u otros grupos de personas quieren recorrer las instalaciones pueden hacerlo de forma gratuita agendando con tiempo una visita. Eso sí, reciben aportes voluntarios con el cual pueden solventar algunos de los gastos que existen.

Próximo proyecto

El próximo proyecto que tienen como entidad es poder colgar un esqueleto de ballena y poder inaugurar un nuevo espacio recuperando un galpón de 55 metros por 15 metros, lo que se transformaría en la primera pieza del pabellón de grandes cetáceos.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco

Así, y con todo el trabajo hecho anteriormente, el Museo de Historia Natural Río Seco abriría -una vez más- un espacio para la investigación, la Educación y la puesta en valor del patrimonio natural de la región de Magallanes y la Antártica Chilena.

Museo de Historia Natural Río Seco
Museo de Historia Natural Río Seco