Autonomía del pueblo mapuche, una participación ciudadana vinculante, incorporar el concepto de género y también la visión del mundo de la discapacidad proponen representantes de algunas agrupaciones de los Ríos, para que se incluyan en la redacción de la nueva Constitución.

Para la Integrante de la Red de mujeres de Valdivia y del Colectivo Feminista Insurando, Debbie Guerra, el resultado del plebiscito es importante, pero lo más significativo será la elaboración de una nueva constitución y la definición de quienes tendrán a su cargo dicha tarea.

Para Guerra se debe buscar un traspaso del resultado del plebiscito a esta nueva etapa, donde la opinión de la ciudadanía deberá ser preponderante, destacando tres puntos en esta materia.

Para la integrante del Movimiento Río San Pedro Sin Represas Fernanda Ochoa, se debiera generar igualdad de oportunidades a los independientes que pretenden ser candidatos a constituyentes.

A juicio de la también integrante de la mesa ciudadana por un Río San Pedro Sin Represas, la nueva Constitución debiera generar una serie de instancias de participación ciudadana de decisión sobre temas importantes en materia comunal, regional y nacional, el que debiera tener la característica de vinculante.

El Werkén del Parlamento Mapuche de KozKoz Jorge Weke, considera importante que el congreso pueda definir una destinación de escaños reservados para representantes de los pueblos originarios.

A su juicio la nueva constitución debiera incluir la recuperación de los territorios de las comunidades mapuches que en la actualidad están en manos de terceros, además de otorgarles una real autonomía por medio de un gobierno federal.

El tesorero del Consejo Comunal de la Discapacidad de Valdivia Leonardo Loyola, dijo que pese a que no existen escaños reservados para las personas en situación de discapacidad, hace meses que el tema está siendo dialogado con una serie de autoridades y personas que podrían llegar a ser candidatos a constituyentes.

Para los entrevistados, la clase política del país tiene una importante tarea, el transformar la gran votación en el plebiscito de quienes no pertenecen a un partido político a los constituyentes que deberán elaborar la nueva carta magna, de lo contrario, una vez más le estarían dando la espalda al pueblo.