En libertad, aunque impedidos de abandonar el país, quedó el lonco Alberto Curamil y su sobrino, investigados por un delito de Ley Antibarricadas y por no portar permisos de desplazamiento, al ser detenidos ayer en las cercanías de Perquenco, tras una manifestación en la carretera que obligó a suspender el tránsito en ambos sentidos por casi una hora.

La defensa del lonco, a cargo de la abogada, Manuela Royo, presentó una denuncia por apremios ilegítimos en favor de su representado, quien recibió impactos de perdigones en su cuerpo.

Ante el Juzgado de Garantía de Lautaro se desarrolló una audiencia de control de la legalidad de la detención y formalización de la investigación, respecto de Alberto Pascual Curamil Millanao, lonco de la comunidad Pancho Curamil de Curacautín, y su sobrino, Eduardo Curamil.

La Fiscalía invocó la figura legal derivada de la interrupción del tránsito en la Ruta 5, conocida como “Ley Antibarricadas” y la infracción al Código Penal por no portar permisos de desplazamiento, según precisó la abogada defensora, Manuela Royo, quien además anticipó que ingresaron una denuncia en contra de Carabineros.

Un hijo del lonco, menor de edad, que fue detenido junto a su padre tras ser derivado a una unidad policial, fue dejado posteriormente en libertad. Sin perjuicio de ello, la abogada confirmó que se pidió oficiar al Instituto Nacional de Derechos Humanos y a la Defensoría de la Niñez para que se hagan parte en la causa.

Es preciso indicar que la tarde del jueves se instalaron barricadas en la Ruta 5, cerca del acceso norte de Perquenco, impidiendo el tránsito vehicular en ambos sentidos, para manifestar el rechazo de las comunidades mapuche por un incendio que -acusan- fue intencional y que destruyó una vivienda de una werkén del sector.