La donación de órganos para salvar vidas a través de trasplantes sigue siendo un tema de preocupación en la provincia de Osorno. En el Hospital base San José de Osorno, que básicamente se encarga del área de nefrología (riñón), hay por lo menos 29 pacientes que se encuentran en lista de espera y otros 35 en proceso de análisis.

Tras la muerte del pequeño León Smith por no encontrar un donante de corazón, la discusión se ha instalado en el país. Y es que si bien la ley establece que todos somos donantes salvo manifiesta oposición, es la familia la que finalmente termina por decidir. Según datos entregados a 2015, las estadísticas muestran que un 53% de los familiares se oponen a la hora de donar los órganos, pese a que en vida la persona pudo haber manifestado su intención de ser donante.

Según explicó Pedro Soto Ruiz, enfermero e integrante del equipo de Procuraduría y Trasplantes del Hospital San José, existen mitos y creencias que finalmente afectan en la decisión de concretar la donación, como el que no se trate a la persona debidamente con el fin de generar su muerte para la extracción de órganos.

De acuerdo al profesional, sólo se trabaja con personas sacadas de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) que registran muerte cerebral y que en la práctica están muertas. Otro tema que descartó el la posibilidad del tráfico de órganos, algo que descartó de plano.

De acuerdo a Rebel Parada, enfermera y también integrante del equipo especializado en el Hospital, lo importante es la discusión a nivel familiar sobre el tema, pero sobre todo en los niños, para lo cual han integrado diversas metodologías para concientizarlos desde pequeños sobre la importancia de la donación de órganos.

El pasado 2015 fueron tres las procuras de órganos en Osorno, procedimientos que dieron una nueva oportunidad de vida a 13 personas, según informó Rodolfo Soto.

A juicio de muchos, quien por diversas razones personales o familiares no accede a ser donante, no debiera tampoco estar dentro de los candidatos a recibir un órgano si es que llegase a necesitar uno, realidad que podría evitarse si es que todo estuviera claro tras una conversación familiar sobre el tema.