Un olvido amenaza con provocar una nueva polémica al interior del Partido Socialista, luego que la colectividad quedara fuera del proceso judicial por el secuestro calificado del ex diputado por Valdivia, Carlos Lorca.

Se trata del caso que involucra la desaparición de los miembros de la comisión política clandestina del PS, durante la dictadura, operación desarrollada por la DINA entre marzo de 1973 y octubre de 1975.

Entre los políticos desaparecidos se cuentan Michelle Peña Herreros, Exequiel Ponce Vicencio, Mireya Rodriguez Díaz, Modesta Wiff Sepulveda, Ricardo Lagos Salinas, Alfonso Mancilla Ramírez, Sara Donoso Palacios, Jaime Lopez Arellano, Rosa Soliz Poveda, Alfredo Rojas Castañeda y Carlos Lorca Tobar.

Precisamente este último es todo un símbolo para los socialistas que debieron enfrentar los primeros años de la dictadura de Augusto Pinochet, tras su éxito organizando la Brigada Universitaria Socialista (BUS), que sirvió de émbolo para las Juventudes Socialistas; en donde tenía activa participación la entonces estudiante de Medicina de la Universidad de Chile, Michelle Bachelet, quien lo consideró su “mentor”.

Tras el 11 de septiembre de 1973, el grupo pasó a la clandestinidad, tratando de reconstruir el comité central del partido, en medio del caos institucional y la detención y exilio forzado de muchos dirigentes emblemáticos.

Sin embargo, la tarde del 25 de junio de 1975 fue detenido por agentes de la Dina, siendo conducido en un Fiat 125 color rojo hasta Villa Grimaldi, desde donde se le perdió el rastro tras ser sometido a torturas por los agentes del órgano represor de la dictadura, según consta en los testimonios del Informe Rettig de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación.

Su detención y posterior desaparición actualmente es investigada por el ministro en visita extraordinario para causas de Derechos Humanos de la Corte de Apelaciones de Santiago, Miguel Vázquez, quien sin embargo dejó fuera del proceso judicial al Partido Socialista, según publica La Segunda.

Y es que de acuerdo al vespertino, el representante del PS -en este caso su presidenta Isabel Allende Bussi- no se sumó a la acusación fiscal ni tampoco presentó alguna acusación en contra de los ex agentes de la Dina implicados en el caso, dejando “abandonada la acción”.

Al respecto, el abogado del partido, Juan de Dios Parra, se defendió señalando que “tenemos una opinión procesal diferente. Es algo que estamos dilucidando en estos días”.

Recordar que este sería el segundo “olvido” polémico, tras el recordado episodio cuando un retraso de la senadora Isabel Allende dejó temporalmente sin elecciones primarias a la Nueva Mayoría.