El círculo cercano del condenado expresidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, insistió en que “sería importante” que Michelle Bachelet lo visite en la cárcel de Curitiba, en donde se encuentra recluido por delitos de corrupción y lavado de dinero en el marco del Caso OAS.
El excanciller brasilero Celso Amorim, reconoció que “sería muy importante que la presidenta Bachelet pudiera venir a verlo” al condenado exmandatario, por los delitos de corrupción y blanqueo de dinero.
En entrevista a La Tercera, Amorim valoró que la exjefa de Estado fuera parte del grupo de figuras de la oposición -como el exsenador Carlos Ominami– y parlamentarios en ejercicio -como la diputada comunista Carmen Hertz y el autonomista Gabriel Boric-, quienes firmaron la carta de apoyo para que Lula pueda inscribir su candidatura presidencial.
Uno de los que no firmó la misiva fue el exministro de Relaciones Exteriores de la administración Bachelet, actual presidente del PPD, Heraldo Muñoz, quien llamó a sus compañeros de la oposición a tener “tolerancia cero” con los actos de corrupción, independiente de si ocurrieron en Chile o en el exterior.
Desde el oficialismo, el secretario general de la UDI e integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, el diputado Issa Kort, planteó que la oposición es “inconsecuente”, ya que critica “sólo algunos actos de corrupción”.
Con respecto a la posible visita de la expresidenta a la cárcel de Curitiba para reunirse con el exmandatario brasileño, la también integrante de la comisión, la diputada comunista Carmen Hertz afirmó que “es un deber moral” de Bachelet visitar a Lula.
El pasado viernes estaba agendada la reunión entre los dirigentes de la ex Nueva Mayoría -que firmaron la carta de apoyo- con el embajador de Brasil en Chile, Carlos Sobral. Finalmente, el encuentro no se materializó por decisión del organismo brasileño.