La subsecretaria de redes asistenciales, Gloria Burgos, confirmó que el Ministerio de Salud está evaluando cómo abordar los altos niveles de objeción de conciencia en hospitales públicos por la ley de aborto en tres causales.

Se trata de una mesa técnica de la que participan el Colegio de Matronas y la Sociedad chilena de Obstetricia y Ginecología, en la que se busca resolver el obstáculo que podría afectar la ejecución de la nueva normativa.

Burgos afirmó que dentro de las propuestas que evalúan se encuentra la de conformar equipos especializados que intervengan a las pacientes en zonas determinadas.

Burgos aclaró que, de todas formas, el ministerio sigue siendo partidario de trasladar a las pacientes que así lo requieran a un centro que sí cuente con los especialistas.

Para el senador socialista por Osorno, Rabindranath Quinteros no es suficiente el traslado de la paciente, sino que es partidario de conformar equipos especializados que atiendan a las mujeres en cada servicio de obstetricia y ginecología de los hospitales públicos.

Opinó que “todos los establecimientos donde ocurre, tipo 1 o 2, deben existir profesionales que no tengan objeción de conciencia. No puede ser que el director del Hospital de Osorno diga ‘¿cuál es el problema, si Puerto Montt queda a 40 kilómetros?”

El vicepresidente del Colegio Médico, Patricio Meza, en tanto, afirmó que el Ministerio de Salud debe propiciar que tanto los médicos que se declaren objetores como los que no lo hagan se desempeñen en el sistema público y no discriminar a los profesionales por sus idearios.

A través de un comunicado, la Sociedad de Obstetricia y Ginecología afirmó que “es responsabilidad del Estado – a través de sus autoridades e instituciones-, el proveer toda la infraestructura de recursos humanos y técnicos, para que las prestaciones se efectúen con plena seguridad, para las mujeres”.

Agregó que “reafirman su compromiso de seguir trabajando, para entregar la correspondiente asesoría técnica y científica” a las autoridades.