Un total de 16 personas fueron detenidas tras los disturbios ocasionados esta madrugada en el centro de Asunción, hacia el final de la cuarta jornada de las protestas contra la gestión de la pandemia por parte del Gobierno del presidente Mario Abdo Benítez, cuya renuncia es exigida en las marchas ciudadanas comenzadas el viernes.

Fuentes policiales informaron hoy de que los arrestados, en su mayoría jóvenes, pasarán a declarar ante la Fiscalía como presuntos participantes en esos hechos, en los que se causaron destrozos, se prendieron hogueras y que tuvo uno de sus focos frente a la sede del gubernamental Partido Colorado.

Los manifestantes, en torno a los cincuenta, mantuvieron escaramuzas y enfrentamientos con las Fuerzas de Operaciones Policiales Especiales hasta que la situación fue controlada.

El grupo se había organizado tras una masiva protesta pacífica, la cuarta consecutiva, para mostrar el hartazgo ante la falta de insumos en los hospitales públicos y la desatención sanitaria por parte del Gobierno.

Las denuncias se extienden a otros ámbitos como el de la educación y a los casos de corrupción que salpican a un Gobierno calificado por los manifestantes de inoperante y de no emplear los recursos en beneficio de la población.

En los últimos días, los asistentes de las convocatorias ya piden la salida de todo el Gabinete colorado, incluido el vicepresidente, Hugo Velázquez.

De hecho, el Partido Liberal, el mayor de la oposición, anunció el lunes que tramitará una iniciativa de juicio político a Abdo Benítez y a Velázquez, si bien no cuentan con los votos necesarios para que el proyecto sea aprobado en la Cámara de Diputados, de mayoría oficialista.

El descontento provocó la renuncia del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, a lo que el sábado siguió el anuncio de Abdo Benítez de cambios ministeriales, entre ellos el de Educación.

Los ciudadanos autoconvocados para las protestas consideran que se trata de cambios cosméticos y aseguran que seguirán movilizándose hasta la caída del Gobierno.

Para hoy está previsto el juramento del nuevo ministro de Salud, Julio Borba, que se ha comprometido a redoblar los esfuerzos para paliar la falta de insumos en la red sanitaria pública, de las más atrasadas de la región.

Esa realidad se ha visto sobrepasada por el ascenso de casos de covid, con un aumento sostenido de los contagios en las última semanas que el Gobierno atribuye al relajamiento social.

Anoche se registraron 25 muertes y 1.817 nuevos casos, con lo que el total de contagios asciende a 169.860 y los fallecidos a 3.343, en una población de unos siete millones de habitantes.

Hasta el momento han llegado al país sudamericano 24.000 vacunas (20.000 donadas por Chile y 4.000 contratadas con Rusia), todas destinadas al personal sanitario.